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De la corresponsalía
ACAPULCO, Gro, 18 de octubre/2015 (agencia acento)
Dos escoltas del gobernador electo de Guerrero, Héctor Astudillo, fueron muertos en una discoteca de Acapulco, al lado de donde cenaba el futuro mandatario estatal.
Este deberá asumir el mando el 27 del presente.
El tiroteo se produjo en momentos en que el gobernador saliente, señalado como ex guerrillero, con nexos a cárteles de Colombia, Rogelio Ortega, ha renunciado más de una vez a seguir sustituyendo al titular, el perredista Ángel Heladio Aguirre, renunciado tras la masacre de normalistas en Ayotzinapa. Por cierto, es señalado como responsable de una masacre anterior, contra una veintena de campesinos, en 1997, cuando era secretario general de gobierno.
La Fiscalía General de Guerrero dijo que indaga el ataque que un grupo armado perpetró anoche contra una famosa discoteca sobre la Costera Miguel Alemán, pero el hermetismo que muestra hace dudar de su éxito.
Las víctimas son dos escoltas del Gobernador electo, aledaño al negocio atacado.
El gobierno de Guerrero que encabeza Ortega, se ha rebelado contra el gobierno federal en forma indirecta, apoyando a las protestas de normalistas, deudos de los acribillados y desaparecidos el 26 de septiembre y oportunistas.
El gobernador Ortega reveló que no aplicará la Reforma Educativa del gobierno federal votada en el Congreso en reformas constitucionales que él juró respetar; esta incluye ceses a maestros que cobren sin trabajar por más de tres días de ausentismo; suspende pagos a faltistas (que han dejado sin clases a la normal estatal, a cuyos estudiantes dicen defender) pero más a buena parte de algo como 1.5 millones de estudiantes en planteles de la entidad.
“Prefiero renunciar” a descontar a maestros por faltar: Ortega
Esta figura entre las más rezagadas del país en alfabetización y educación.
El gobernador Ortega dijo que él preferiría renunciar a “reprimir” a maestros en protesta y que optaría dialogar con ellos antes que cortar la paga a quienes dejan aulas para efectuar cierres de carreteras, plantones, mítines y formas de “protestas pacíficas”.
Estas acciones callejeras son parte de la razón por la que el estado está -en palabras del gobernador- “en quiebra” con adeudos por m13 mil millones de pesos. En su mayor parte, son el resultado de pagar al magisterio, en el que hay decenas de miles de los llamados “viadores” que sólo siguen existiendo en la nomina. A ello se suma el bloque de los sindicalizados en la oposicionista Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que reclaman el control de lo que ahora tiene en sus manos la Secretaría de Educación Pública, SEP: altas, ascensos, cambios de plaza y bajas, sin rendir cuentas.
La disputa por la autoridad sobre la educación pública –que en el país es obligatorio otorgarla gratuita en el nivel elemental, para unos 30 millones de estudiantes de primaria y secundaria en el país, entre otros niveles- sigue enfrentando al gobierno de Guerrero y el federal.
En ese ambiente se da el tiroteo que algunos observadores sospechan es muna forma de amedrentar al nuevo mandatario por asumir el mando, y que viene bajo la bandera del partido del Presidente Peña Nieto, que ganó 5 de nueve gubernaturas en juego este 2015 y mantiene el poder en dos tercios de las gubernaturas y la mayoría de alcaldías, y el Congreso federal así como los estatales.
Ortega, salido de la Universidad Autónoma de Guerrero que ha controlado como un coto de poder por décadas, y que desde ella controlaba o al menos influía en el activismo de la normal de Ayotzinapa, como en otras universidades, fue escogido para suceder al perredista-panista Ángel Heladio Aguirre –electo en 2010 para un mandato que terminaría este final de octubre- no ha podido, no ha querido o solo ha simulado enfrentar la inseguridad más violenta del país. Acapulco encabeza los focos de acribillamientos, secuestros y asaltos armados en México.
En Guerrero, el PRI regresa con Astudillo. Elimina a dos sexenios de gobiernos de oposición; uno panista y el otro –el de Angel Heladio Aguirre- producto de una “alianza contra natura” como la han llamado a la del derechista PAN e izquierdista, PRD.
Héctor Astudillo, gobernador electo en junio reciente, ha descartado siempre adelantar el inicio de su gobierno, como lo planteó el actual mandatario interino, Rogelio Ortega, ante la crisis financiera en el estado; pero dijo que lo apoyaría…”La ley dice que hay que ser gobernador por seis años y el mandato empieza el 27 de octubre. Hay que ser muy respetuosos en los tiempos del gobernador”, dijo Astudillo. en una entrevista radiofónica reciente.
PAN y PRD dejaron deuda por $13 mil millones
Acerca del pasivo histórico que tiene Guerrero de 13 mil millones de pesos por el pago plazas no reconocidas en secretarías como la de Educación, Astudillo dijo que hay una solución.
“La situación tiene salida conforme se acerca diciembre. Estados como Guerrero recurren a la federación para solicitar ayuda. Éste es el mismo caso, sólo que el gobierno termina el 26 de octubre y seguramente tienen una importantes cantidad de compromisos por resolver”, indicó.
El gobernador electo de Guerrero aseguró que la crisis financiera que según Ortega tiene al estado al borde de la quiebra no le asusta, y que lo que más le preocupa es la violencia, la inseguridad y los problemas sociales.
