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Por Erika Ruíz Merino
Hoy, una familia pachuqueña está de luto por culpa de la delincuencia, criminales que le han robado la vida a Lorena, humanos sin escrúpulos terminaron con su historia de vida, dejando en el más profundo dolor e impotencia a sus padres, familia y amigos.
Hoy ha quedado demostrado que la inseguridad que se vive en nuestra ciudad capital, nos mantiene bajo el terror, nos mantiene secuestrados en la indigna zozobra del temor de ser víctimas de la violencia.
No podemos aceptar que el esposo de la presidenta municipal Yolanda Tellería, quien es la encargada de brindar seguridad a sus gobernados, vea este problema con tanta frivolidad, burla y falto de interés, cuando expresa su parecer ante los hechos violentos con las siguientes palabras: “Pues por pendejos. Ahora debe la alcaldesa ponerles un ángel guardián a cada ciudadano. Está cabrón. Se dejan engañar por cualquier idiota”; palabras ruines, llenas de odio y frustración, las de Daniel Ludlow.
Ante todo esto, solo nos queda —como sociedad— unir fuerzas, estar alertas y convertirnos cada uno vigilantes de nuestros hijos, de los amigos de nuestros hijos, de los hijos de nuestros vecinos e, incluso, de nuestros desconocidos.
¡Basta ya de tanto terror!
