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* De acuerdo a la Doctora María Patricia Hernández, Jefa del Servicio de Audiología de la Unidad de Atención Médica Asistencial a Pacientes de Grupos Vulnerables, de cada mil bebes, dos pueden nacer con algún tipo de sordera profunda
Por Erika Ruiz Merino
Especial de Expediente Ultra
Ian tiene cuatro años de edad, al nacer le diagnosticaron Microtia, una deformación del pabellón auricular donde el oído externo se encuentra poco desarrollado pero sin afectar el canal auditivo interno, por lo que sus médicos esperan que en unos años pueda someterse a una cirugía reconstructiva, y de esa manera poco a poco, mejorar su calidad de vida.
Mientras tanto, y desde su nacimiento ha acudido junto a Mariana, su madre a terapias y sesiones de evaluación audiológica, todo ello, gracias a la aportación de un equipo multidisciplinario que atienden a menores como Ian y a personas que por alguna situación han visto mermada su capacidad auditiva.
De acuerdo a la Doctora María Patricia Hernández Soto, Jefa del Servicio de Audiología de la Unidad de Atención Médica Asistencial a Pacientes de Grupos Vulnerables, Campus Arista perteneciente a la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), de cada mil bebes, dos pueden nacer con algún tipo de sordera profunda, esto dijo, es posible diagnosticarlo a través del Tamiz Auditivo, estudio que se realiza únicamente en Unidades Hospitalarias de la SSH desde el año 2010.
Enfatizó en la importancia de realizar el tamiz como primer paso para identificar el tipo de afección, ya que señaló es común que niños prematuros presenten problemas en oído que en caso de ser detectado en los primeros tres meses de vida, es posible que respondan mejor a alternativas que eviten limitaciones en su desarrollo integral, principalmente en el lenguaje y aprendizaje, dijo “ es indispensable que los padres de familia y maestros entiendan, que la educación y buen rendimiento de un niño en la escuela, suele estar vinculado a su adecuada audición”.
El tratamiento según sea el caso, requiere la adaptación de auxiliares auditivos y en algunas ocasiones terapia de lenguaje e incluso implantes cocleares (dispositivo electrónico que realizan el trabajo de las partes dañadas del oído) donados por el Seguro Popular.
Al igual que en los niños, la especialista detalló que los adolescentes y adultos acuden al área de Audiología, de manera fundamental al presentar Otitis o inflamación del oído debido, generalmente, a una infección, sin embargo, aseguró que va en aumento el número de casos de jóvenes que pierden la audición por el uso excesivo de audífonos o el exponerse a altos niveles de ruido.
En el caso de adultos mayores, el principal problema son las complicaciones por enfermedades Crónico Degenerativas, pues la Diabetes, Hipertensión o Colesterol pueden derivar en la pérdida auditiva.
En el área de Audiología se cuenta con dos cabinas de audio y dos de terapia del lenguaje, ahí el paciente ingresa en el pequeño espacio, para someterse a varios estímulos sonoros a través de audífonos a fin de determinar su umbral auditivo, posteriormente es sometido a una prueba de impedanciometría acústica, la cual permite medir de forma objetiva la respuesta del oído medio e interno, así como exámenes de potenciales auditivos.
Finalmente, insistió en que ante cualquier síntoma o malestar relacionado con la calidad auditiva, es necesario acudir al médico para realizar la valoración debida y oportuna.
