Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 59 segundos
ENTRESEMANA
“Ven, no quisiera saber que existe otra vida si no estás tú…” Los Impala
Por MOISÉS SÁNCHEZ LIMÓN / @sanchezlimon1
¿Se imagina usted la expresión del ex niño verde, Jorge Emilio González, cuando leyó la carta de renuncia de Juan Carlos Hank Krauss a las filas del partidazo del tucán en Baja California?
Sí, señoras y señores, desde el día 1 de este mes navideño, el nieto del profesor Carlos Hank González renunció formalmente al Partido Verde Ecologista de México, en cuyas filas militó brevemente y fue nominado al Senado de la República.
Sí, breve pero conciso porque, mire usted, su candidatura y por supuesto la campaña de rigor para senador duró apenas un suspiro, porque el joven Hank Krauss llegó al partidazo el año pasado, no logró el escaño pero se mantuvo en el PVEM hasta el primer día de este último mes de 2025.
Ahora, échese este trompo a la uña –La China Mendoza dixit– merced a su campaña, en el proceso electoral 2024, el PVEM recuperó el registro que perdió durante una década en Baja California. Y lo conserva. O sea…
¡Recórcholis, Lupita Taddei!
Así que, a partir de ya, el ex niño verde Jorge Emilio González tendrá que buscar la cuadratura al círculo para que al tucán no lo rosticen a fuego lento y pierda de nueva cuenta el registro en la elección intermedia de 2027, en la que el mismo Juan Carlos Hank Krauss gane la gubernatura y atienda a la demanda de la mayoría de los bajacalifornianos que busca una mejor opción a las harto conocidas de la 4T.
Porque, estará usted de acuerdo en que la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda anda con algo más que de capa caída y esto no es campaña negra ni nada similar, una vez que la administración Trump le revocó la visa gringa, también a su marido Carlos Torres Torres de quien anda divorciándose.
¡Sopas, perico!
Así es esto de la polaca: el que se ríe se lleva y, por supuesto, Morena de la mano de la 4T está en abierto riesgo de perder la gubernatura de Baja California en 2027. cosas de la vida, quien, como le cité, está en un tris de lograr el cargo en los comicios intermedios, es ni más ni menos que el joven Juan Carlos Hank Krauss.
Mire usted, no es que ande de oficioso o haciéndole al enmascarado pitoniso con la lectura de la bola de cristal. Los hechos son eso: hechos.
Lea lo citado por Hank Kraus en la carta de su renuncia al PVEM que, no lo dude, le habrá caído en el meritito hígado a Jorge Emilio:
“Mi vida en la política seguirá construyéndose con lealtad hacia el votante y desde la plataforma que la sociedad me indique, sin fallarle a quienes confíen en mi para representar sus intereses y enfrentar los retos que nuestra región demanda”, cita Hank Krauss en el último párrafo de su carta.
¡Ah!, por supuesto ya salieron los puristas y descalifican al joven nieto del profesor Hank porque ha cambiado de partido. Primero fue tricolor, luego se sumó al PES, de ahí al PVEM y hay elementos para considerar que se irá a Movimiento Ciudadana y, con el color naranja contender por la gubernatura de Baja California.
Pero que nadie diga que hace frío porque, un joven político que en 2021 logró ser regidor en el Ayuntamiento de Tijuana –por el PES– y luego candidato a senador por el verde, amén de que con su campaña logró que este instituto político, el PVEM, recuperara el registro, no lo hizo por obra y gracia del espíritu santo.
¿Entonces?
Lo mínimo y de sentido común es que, al inicio de una nueva etapa en la política bajacaliforniana se sume al partido que mejor convenga a su carrera y busque un cargo superior.
¿A poco no? Y esta nueva ruta justo a poco más de un año del proceso electoral en el que los ciudadanos de Baja California le toquen las golondrinas a la 4T y despidan a doña Marina del Pilar, quien ya no podrá ir de shopping a Estados Unidos.
¿Será el momento de Movimiento Ciudadano y de Dante Delgado Rannauro, presidente del Consejo de Administración del Partido Naranja, para hacerse de otra gubernatura?
Dicen que cuando el animalito tiene plumas de pato, pico de pato y patas de pato, es un canijo pato, Por eso, después de aquel encuentro en Jalisco con Dante Delgado, no hay que buscarle, esa es la apuesta, el objetivo de Hank Krauss cuya carta de renuncia al PVEM, fechada el 1 de diciembre, pero recibida “para trámite” hasta el día 17 por Raúl Servín Ramírez, integrante del Jurídico del CEN del PVEM es clara.
Y le dice al ex niño verde:
“Esta etapa concluye de manera positiva y exitosa. La experiencia adquirida, el territorio recorrido, los resultados electorales y comunicacionales, así como la recuperación del registro del partido después de diez años de haberlo perdido, hablan por sí mismos”.
Seguidamente aborda la ruta que debe seguir sin el PVEM. Lea usted, la conjetura es elemental:
“Sin embargo –abunda Hank Krauss–, las demandas expresadas por la gente y la fuerza de las causas que emergieron durante el camino me obligan a ampliar mi actividad social y a dedicar esfuerzos a proyectos que trasciendan los límites partidistas y los acuerdos políticos entre grupos, para generar un impacto directo en las comunidades”.
Así que Jorge Emilio González, presidente del PVEM, una vez que el hijo de Jorge Hank Rhon y nieto del profesor Hank González, le agradece sus atenciones y le informa que seguirá trabajando, desde otras trincheras, por el bien de Baja California, debe buscar, entre esos “nuevos liderazgos y perfiles provenientes de la sociedad” que le refiere Hank Krauss, al mejorcito para nominarlo en 2027 al gobierno de la entidad.
¿Le alcanzará al ex niño verde? Será que no tendió los puentes necesarios para retener en las filas del partidazo el joven Hank y se haya instalado en el riesgo no solo de no contar con un candidato o candidata con suficiente peso político y arraigo para contender y ganar en los comicios intermedios, de perder nuevamente el registro del Tucán.
En fin, igualmente a la 4T se le complica el escenario y en Baja California, como en otras entidades puede perder hasta el modito de andar porque, como cita la señora Luisa María Alcalde “al pueblo solo lo puede salvar el pueblo”, pues sí, pero con un liderazgo como el que logró Hank Krauss en tiempo récord.
Por de pronto, Drakko, vámonos de asueto para reflexionar en estos días acerca de la vida y sus avatares en los nuevos tiempos. Aunque hay que recordar y comulgar con la máxima de Kailmán: Serenidad y paciencia.
A mis 17 lectores, lectoras de planta y parientes que los acompañan, a usted que me favorece con su lectura, a mis hijos e hijas, a mis hermanos y mi hermana Conchita, a Yaz y Moy en especial porque andan en ese espacio ignoto, feliz Nochebuena, chingona Navidad y que 2026 sea de pronta recuperación, éxito y, sobre todo, salud. ¡Salud! Digo.
sanchezlimon@gmail.com www.entresemana.mx @sanchezlimon1
