Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 9 segundos
Ciudad de México, 25 de junio de 2015 (agencia acento) Un poquito tarde –la ley no tiene prisa- se sabe que Marcelo Ebrard está autoexiliado en París, temeroso de ir a prisión; mientras, a su ex esposa y la casera que le renta la vivienda que tiene en el DF, les congelaron cuentas bancarias.
Y, al menos en medios, el ex Jefe de Gobierno está a un paso de -ahora sí- de ir a prisión si es que no se repiten fallas y todo termina en un falso arresto.
El “mejor alcalde del mundo” perdió su calidad de presidenciable; perdió su fuero, sin diputación ni siquiera en calidad de suplente y pierde la tranquilidad de por vida, a menos que la ley salga con que Marcelito no debe ni el saludo a ningún mexicano.
Ebrard se supone que reaccionó como Carlos Salinas, que temía el arresto, tras de que su otrora “ahijado”, Ernesto Zedillo, se transformó de su corderito al peor enemigo y en cerró a Raúl Salinas, el Hermano Incómodo, como sospechoso de homicidio y robos demenciales a la nación.
Así Ebrard salió pero más bien como Napoleón Gómez Urrutia, Napito, intocable líder minero, acusado de apoderarse de una montaña de millones de dólares, propiedad de sus representados. Vive feliz en Canadá, protegido por la inacción para aplicar la ley allá, como acá.
Eso parece buscar Ebrard, la protección de París o la desmemoria en el México, donde los escapes son comunes entre pillos, sobre todo de cuello blanco: |
Por ahora, este jueves el país se desayunó con la noticia de que -publican Reforma y otros medios-, la Unidad de Inteligencia Financiera de Hacienda congeló las cuentas bancarias de Mariagna Prats, ex primera dama del DF –aunque fue una boda de a mentiritas- y de la Constructora Enalser. Es la que renta al ex Jefe de Gobierno, en 80 mil pesos, la casona en la colonia Roma que él mismo vendió y luego revendieron en 19 veces la cifra pagada y que huele a un manojo de delitos a ojos vistos. Se trata de un edificio catalogada por el INBA como de “valor histórico”, con jardín vertical, ventanales estilo porfiriano blindados, alberca climatizada, vapor, elevador y roof garden, publica La Razón. Se congelan cuentas a la “casera” de Ebrard, que es la Constructora Enalser. Esta fue la compradora de la casa vendida por el Jefe de Gobierno de entonces, de la cual es copropietario Sergio Fuentes, socio de un hermano de Ebrard, Enrique. Pero hay más: el nuevo “hermano incómodo”, Eugenio forma parte del fraude fiscal del banco HSBC, según Swissleaks, cuando publicó nombres de clientes con cuentas secretas en ese banco para evadir impuestos. El Grupo Walmart –usted quizá lo recuerde publicado- cuadruplicó sus tiendas en la capital del país; para ello hizo lo que casi nadie hace en el DF: pagar por un trámite como hizo Wal Mart. Este pagó 24 millones de dólares en sobornos, según The New York Times. Ahora que la fortuna de Eugenio haya aumentado a cuatro veces, es una mera casualidad de muchas que se dieron entre parientes y aliados del gobierno capitalino, especialmente entre 2010 y 2012. |