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Por Samuel Cantón Zetina
Falta mucho, pero ya las encuestas recogen el sentir popular de quienes van adelante en la carrera por la sucesión de AMLO.
Mucha agua correrá aun bajo el puente, y los sondeos solo son instantáneas del momento, y sin embargo dos nombres acaparan consistentemente los primeros lugares: Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard.
Resultan, en efecto, “los más populares de la 4T”.
Ese mismo resultado arrojó la encuesta de febrero de Massive Caller.
“¿Quién considera que es quien mejor puede defender el legado del presidente Andrés Manuel López Obrador?”, preguntó la empresa.
La gente respondió que el secretario de Relaciones Exteriores (42.3%), seguido por la Jefa de Gobierno de la CDMX con 37.4%.
Se antoja muy interesante el ejercicio, no únicamente por especular con el lejano relevo del presidente, sino porque al cabo del primer tercio del sexenio la competencia dentro de MORENA se da (parejera) entre un hombre y una mujer.
Rosario Ibarra de Piedra fue la primera mujer candidata presidencial, y después de ella otras como Josefina Vázquez Mota y Cecilia Soto (Rosario Robles, Griselda Álvarez y María de los Ángeles Moreno, por mencionar algunas, destacaron en su momento aunque sin llegar a ser candidatas), pero ninguna de ellas fue favorita o estuvo en verdadera posibilidad de ganar la elección y ceñirse la banda tricolor.
Con Sheinbaum es muy diferente: avanza de igual a igual con Ebrard en la búsqueda de una candidatura que por sí misma equivale a medio triunfo, y existe la idea bastante extendida de que, entre los dos, es claramente favorecida por AMLO.
Es decir: la Jefa de Gobierno está teniendo reconocimiento social (encuestas), y eventualmente tendría el voto más importante: el del ocupante de Palacio.
No obstante, aun admitiendo el enorme peso del sufragio del paisano, si no hay cambio en los criterios de selección de candidatos de MORENA, lo que en 2024 determinará al candidato serán las encuestas.
Y ahí, como vemos, el canciller y ella van en punta.
Debajo se encuentran, con muy bajos porcentajes, Tatiana Clouthier (8.8%) Mario Delgado (6.7%) y Ricardo Monreal (4.9%).
No se proyecta en el horizonte algún tercero en discordia, aunque en respaldo de la teoría de que no se puede descartar, hay que decir que el posicionamiento de Ebrard y Sheinbaum, en gran medida, se debe al protagonismo que el presidente les da.
Otro dato muy a tener en cuenta es que Ricardo Anaya va solo como candidato opositor en 2024.
Quien lo enfrente -por parte de MORENA- tendrá que hacerlo defendiendo el legado obradorista y la continuidad del proyecto de transformación de la 4T.
¿Sheinbaum o Ebrard?
Y DE MAÑANA…
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