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CD de México, 24 de noviembre/2015 (agencia acento) “Es la tercera guerra mundial construida a pedazos”, espetó hoy el Papa Francisco esta tarde, con pesar y firmeza, acerca de los ataques a terroristas a París.
El Santo Padre, calificó de “una acción no humana” y que “no tiene justificación religiosa”.
En tanto, el Presidente de Francia, Francois Hollande, calificó “este es un ataque de guerra” y así serán tratados frente a la justicia los arrestados, entre los que encabeza un francés, al parecer líder de uno de los tres grupos atacantes. Fueron ocho, divididos en tres grupos, los terroristas, que efectuaron el complot en 32 minutos, sincronizados, dijo la fiscalía de París.
La mayoría de los islamistas atacantes, como se sabe, o se hicieron estallar con explosivos prendidos a sus ropas y otros, abatido en el Bataclán y otros puntos.
Allí fue el desastre. La policía se vio impedida a actuar porque los mil 500 asistentes a ese centro de diversión, correrían mayor riesgo. Pero después de estarlos amagando, vinieron los estallidos de dos suicidas atacantes, tras hacer disparos con rifles de asalto, sin piedad, ejecutando a sus víctimas a quemarropa; incluso lo hicieron en los bares vecinos.
De entre los asistentes al menos 89 fueron victimados en segundos ante el estupor lógico del resto y la policía se había contenido de atacar, ante el riesgo de mayores bajas, pero finalmente tomó por asalto el sitio, se dijo hoy.
Con los dos estallidos los suicidas volaron en pedazos pero la onda expansiva hizo efecto en decenas de cuerpos que convirtieron en escena dantesca el lugar.
Cuando entró el comando de policías, el líder de ello solo atino a externar –y su voz se oyó por el circuito conectad a la gendarmería parisina- fue “Dios, es una carnicería”. Y vinieron los disparos; abatiendo al tercer terrorista.
Conforme al protocolo, obligaron a los sobrevivientes a salir hacia puntos con “filtros” o retenes de uniformados y con las manos en alto. ¿Cómo saber si entre el gentío se fugaban los criminales?
Al drama del viernes 13 se sumó hoy un descarrilamiento de un tren en Estrasburgo, al que París no había querido darle el carácter de posible acto provocado, sino de accidente.
Se trata, dijeron fuente policiales de la capital gala, del “peor desastre de tren” en esa ciudad.
Al finalizar el sábado, el recuento de daños involucraba a 129 víctimas fatales, dos de ellas, jóvenes mexicanas con pasaporte español, conforme a la embajada de México en Francia y una, con residencia en California y doble nacionalidad; así como 351 víctimas hospitalizadas. Buena parte de ellas luchaban por sobrevivir, dijo la televisora RTF al final de la tarde, tiempo de París, al medio día en México.
