JOSÉ MEDEL Y SU COMPLOT DE “CHOCOLATE” CONTRA LOS 40 SECRETARIOS DEL SUTGCDMX

Tiempo de lectura aprox: 5 minutos, 11 segundos

*  Afectados en sus intereses económicos, grupos al interior del SUTGCDMX como el del ex dirigente, José Medel Ibarra, trataron de “reventar” el registro de planillas del pasado 3 de septiembre donde tres de los aspirantes formaron parte de un show mediático para victimizarse ante los medios al no cumplir con los requisitos establecidos en la convocatoria, en sus oficinas privadas, Medel confesó haber ofrecido 500 mil pesos a ocho secretarios para que firmaran en apoyo al candidato de su Coalición, Heladio de la Rosa; el objetivo fracasó al carecer de presencia en las bases, pero ahora buscarán alentar disidencias en varias secciones

Por Giuseppe Gatopardo

Especial para Expediente Ultra

Testigos presenciales afirman que el ex dirigente del Único, José Medel Ibarra, que apostó todas sus cartas en la elección pendiente, al ex líder de la Sección 38, Heladio de la Rosa, estaba que echaba chispas el pasado 31 de marzo, un día después del pre registro de los aspirantes a la presidencia del SUTGCMDX.

Apoltronado en el sillón de sus oficinas ubicadas en el barrio de Santa Anita, golpeaba el escritorio con furia y lanzaba amenazas contra el grupo de los 40 secretarios que días antes habían decidido lanzar un candidato de unidad: “¡Pinches secretarios, son unos cobardes; les ofrecí 500 mil pesos a cada uno y no aceptaron!”.

El empresario milloneta que ha logrado acumular con la venta de vestuario y otros enseres al gobierno capitalino una nada despreciable fortuna que le permite pagar rentas en el World Trade Center a algunas de sus ex parejas, hacía alusión a la falta de consensos no alcanzados para que Heladio, líder de la Coalición del Frente Democrático de Trabajadores del GCMDX y Alcaldías, obtuviera las ocho firmas de adhesión que le garantizaran estar presente en las boletas de la cercana elección, pendiente desde enero del 2020.

A confesión de parte, relevo de pruebas y Medel con sus palabras exhibía el poder adquisitivo de su cartera, pero a pesar de haber estado dispuesto a desembolsar cuatro millones de pesos –500 mil por secretario a razón de ocho firmas–, su ofrecimiento no tuvo eco. Nadie aceptó su propuesta indecorosa.

Para los planes del “Mil Máscaras” no había de otra más que tratar de comprar apoyos, porque su Coalición que naciera a la par de su Gaceta Reivindicación Sindical (RS), nunca lograron alentar un movimiento que despertara las conciencias en el sindicato más grande de la ciudad.

Sus “gemelitos” fueron desde un principio dos engendros concebidos para posicionarlo, junto con sus socios, entre los principales proveedores de insumos y otros servicios más –como la venta de lonchibones–, al gobierno de la CDMX. Instrumentos con fines aviesos, alejados de una genuina lucha sindical.

LA LÍNEA DICTADA POR EL “YO-YO”

Pero volvamos a ese martes 31 cuando Medel hacía las veces de anfitrión y se autoproclamaba como “Líder Moral” de su Coalición. “Le he dicho a Heladio que un líder debe tener más energía, más actitud”, refunfuñaba.

El ex presidente del Único no escatimó denuestos contra los integrantes del Directorio de la FSTSE, cuya paternidad de sus puestos se atribuyó en todos los sentidos. Y sacando su “Yo-yo”, pulió su egocentrismo: “Yo puse en el Directorio a Anguiano (Ricardo); yo puse a Rogelio, yo puse a Xochicale; yo puse a Aarón. Me la deben, yo hablé con Joel…”

Y mientras el “yo-yo” de Medel Ibarra subía y bajaba, los asistentes al inusual cónclave no acertaban a entender el motivo de la reunión que, se suponía, era para hablar de integrar un frente común, pero por cortesía y prudencia debieron “chutarse” la narración de viejas hazañas sindicales, como aquella cuando enfrentó al entonces Jefe de Gobierno y hoy Presidente: “¡Yo fui el único que tuve los güe…para decirle sus cosas en su cara a Andrés Manuel!”.

Y ya “enchilado”, lanzaba a los presentes un ultimátum en su amenazante perorata: “¡Vamos a hacerles desmadre a esos cabrones¡ (a los 40 secretarios); ¡vamos a reventarles la madre¡”.

Días después, el viernes 3 de septiembre el pacto de “chocolate” encabezado por la Coalición de Medel y, al parecer, apoyado por los otros dos precandidatos no logró su objetivo de boicotear el registro de planillas y menos de “reventarles la madre” a los 40 Secretarios y su candidato de unidad”.

SHOW MEDIÁTICO PARA VICTIMIZARSE

Circulan por las redes diversos videos donde supuestamente se impide el registro a Heladio de la Rosa, ex líder de la 38, Sergio Vázquez, ex líder de la 21 y Liborio Muñoz, ex secretario de la 31, tratando de confundir a las bases sobre los entretelones que hubo tras un montaje que buscó desde un principio buscar “pleito callejero” para victimizarse.

Mire usted: curiosamente antes de acudir al recinto de Antonio Caso, Heladio de la Rosa se apersonó en la Oficialía de Partes del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (TFCA), a presentar una denuncia porque se le estaba impidiendo su derecho a participar. En el oficio que muestra a las cámaras, se observa el día 3 de septiembre a las 10 de la mañana, como la fecha y hora en que la querella fue recibida y sellada.

Y nos preguntamos: ¿Si Heladio sabía, como el resto de los inscritos, que no contaban con las ocho firmas de apoyo y ya buscaban otros caminos jurídicos para, según su propia decisión, hacer valer sus derechos, para qué presentarse horas después en la sede del Único?

¿Se trataba de armar show mediático para reventarle la madre a los 40 Secretarios?

Para dejar las cosas en claro: desde el pre registro se les leyó a cada uno de los participantes las reglas establecidas en la Convocatoria. Digamos que se les explicó con manzanitas cuáles eran los requisitos y decidieron seguir adelante, a sabiendas de que no los cumplirían. Si esto no es un plan con maña para confundir a las bases y ganar reflectores en los medios, entonces llamémosle de otra forma más coloquial: faramalla.

El asunto es que los tres inconformes dejaron en claro no tener apoyos suficientes ya no digamos de los secretarios, sino de los agremiados que al final de todo el embrollo de más de año y medio serán los que con su voto libre, directo y secreto, destrabarán la elección pendiente.

Recordemos que los eventos organizados en todos estos meses por la Coalición de Medel no se lograron aglutinar a más de cien personas, doscientas a lo sumo.

¿Acaso cree el ex dirigente que los miles de afiliados a la Caja de Previsión a Lista de Raya (CAPTRALIR), se olvidan de la traición de que fueron objeto cuando dos de sus recomendados al Directorio, Rogelio Carmona y Ricardo Anguiano, firmaron a sus espaldas las modificaciones al reglamento para acuchillarlos con la pérdida de jubilaciones y créditos de vivienda?

¿Dónde estuvo la Coalición y los ahora apuntados para defender a las bases? ¿Dónde? Es pregunta…

LOS INVENTADOS PADRINAZGOS AL CANDIDATO DE UNIDAD

Ahora salen con el cuento chino de que el candidato de unidad, Aarón Ortega Villa le debe la nominación a Medel, a René Bejarano y hasta a Enrique Hanff, cuando Ortega nunca perteneció al séquito de incondicionales del ex presidente del Único, pues fue de los secretarios que luchó por sacar al empresario del vestido y el calzado del sindicato, cuando enloqueció y terminó enfrentado a López Obrador, entonces Jefe de Gobierno. Y no por la defensa de los trabajadores sino de su cartera, tal como ahora sucede.

Quienes conocen realmente cómo se mueven las corrientes internas del Único, saben que haber conseguido poner en sintonía a los dos grupos en disputa más importantes, no es asunto menor y Aarón Ortega debió tejer fino para lograr acuerdos porque es un hombre con experiencia que sabe atemperar, escuchar y conciliar.

Por eso su candidatura de unidad ha resultado una patada en los bajos a grupos de interés económico como el de José Medel Ibarra, quién en sus catarsis y cónclaves de chocolate, lo acusa de haberle dado la espalda. Nada más alejado de la realidad.

El “Mil Máscaras” está desesperado a grado tal que, nos dicen, ahora está sacando la cartera para alentar disidencias en varias secciones, como un Plan “B” para tejer a futuro otro sindicato. Como se intuye, el ambicioso empresario y ex líder no tiene llenadera y no quiere dejar de mamar de la ubre presupuestal del GCDMX. Es bueno que los trabajadores sepan cómo se las gasta este personaje que se ha enriquecido a sus costillas.

Los que insisten en acudir a los tribunales bajo el pretexto de invalidar el proceso, están en todo su derecho, nadie se los puede impedir, pero si en lugar de haberse escondido como avestruces en los meses más álgidos de la pandemia, hubieran acudido en auxilio y defensa de sus compañeros, otro gallo les cantara y tendrían de su lado a miles de trabajadores marchando a su lado, pero saben que los apoyos que presumen como sus cónclaves, son de chocolate.

¿No es así, José Medel Ibarra?

Por cierto, aquí en la ESQUINA DEL MOVIMIENTO dejamos un apotegma ranchero para el que guste interpretarlo: “El que es gavilán, no chilla”.

Nos leemos más pronto de lo que muchos esperan en este espacio.