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* En un acto por demás austero, el mandatario acudió al Congreso Local a dar cuenta su informe de labores sin actos tumultuarios donde se le rendía culto al gobernador en turno; ante los diputados local abrió el debate de las ideas y demostró que su administración empleará los recursos públicos en apoyar los programas sociales y no en eventos rimbombantes
Por Antonio Ortigoza Vázquez
Especial de Expediente Ultra
Contrario a la tradición de los eventos suntuosos donde se rendía culto al gobernador en turno, Omar Fayad Meneses desechó los viejos paradigmas y en un evento austero, sin excesos retóricos ni reflectores, entregó su Primer Informe de Gobierno al Congreso Local.
Todo estaba listo en el recinto parlamentario para recibir de manos del secretario de Gobierno, Simón Vargas, el documento del primer año de labores del mandatario estatal, el reloj marcaba minutos más de las 11 de la mañana; instalados en sus curules se encontraban 29 diputados, de treinta que conforman la LXIII Legislatura, pues el legislador panista, Santiago Hernández Cerón, le hizo el feo a tan importante suceso.
Desde un día antes, el gobernador y diferentes medios de comunicación anunciaban, vía redes sociales, que sería Simón Vargas quien entregaría el informe impreso.
Todo transcurría de acuerdo a lo anunciado cuando, de repente, Simón Vargas se levantaba de su lugar que se le había sido designado; apresurado, junto con diputados y secretarios abandonaban el recinto para encontrar al gobernador quien, con paso veloz, encontraba de frente a su secretario de Gobierno y a diputados locales, los medios de comunicación tomaban fotografías he intentaban sacar una declaración del gobernador. Fue imposible.
Propios y extraños, lo mismo que los legisladores locales no ocultaban el asombro de ver llegar al gobernador, por primera vez en muchos años, los representantes de los medios de comunicación pudieron permanecer dentro del recinto legislativo, algo que en administraciones pasadas era imposible.
Sin “alfombra roja”, como lo dijo Fayad Meneses, sin una seguridad excesiva, entraba el gobernador, acompañado por Israel Félix, Secretario Ejecutivo de la Política Pública, también lo seguía un poco más atrás, el Secretario de Seguridad Pública, Mauricio Deelmar, quien, ayudado por un par de muletas, daba alcance a su jefe; también lo acompañaba Alejandro Enciso, su secretario particular, además de otros integrantes de su gabinete.
Muy atrás quedaron esos informes de bombo y platillo, en los cuales se buscaba dar muestra del poder de convocatoria del gobernador en turno; ya no hubo sala de prensa externa, ni café ni galletes para los representantes de los medios de comunicación, quienes tenían que “cubrir”, ver y escuchar el mensaje del gobernador, en una pantalla donde se trasmitía en vivo el mensaje del mandatario.
Así mismo, ya no se vieron la llegadas de jets privados y helicópteros que aterrizaban en el Aeropuerto, Ingeniero Juan Guillermo Villasana, ausentes las filas largas de autos de lujo que ocupaban el estacionamiento del lugar, tampoco las centenas de elementos de seguridad que se desplazaban al Congreso del estado y sus inmediaciones, las vacas sagradas de la comunicación no fueron invitadas, ni los autobuses llenos de “invitados especiales” de medios nacionales se vieron hoy en la ciudad de Pachuca.
Hoy, día del Informe, las calles permanecen libres de gallardetes que mostraban imágenes del gobernador. Ya nada fue igual, ni banda guerra, ni edecanes, ni guaruras, ni prepotencia, se acabaron las vallas, los arcos de seguridad. Hoy, se trató de un acto meramente austero e institucional.
PUNTUAL DEBATE EN EL CONGRESO
Tras la entrega de su Primer Informe de labores en la Cámara de Diputados hidalguense, Omar Fayadad abrió la puerta al diálogo y el debate de ideas con los integrantes de la legislatura estatal.
Desde la máxima tribuna del estado y, a través de los distintos medios de comunicación, Omar Fayad se pronunció por dejar atrás el viejo formato de culto al gobernador, para dar paso a un formato más ágil y eficiente, donde realmente un mayor número de personas se enteren de los avances que ha mostrado la entidad en los últimos 12 meses.
Se dijo agradecido por los diputados locales, en quienes reconoció su apoyo y respaldo, no sólo a la administración que encabeza, sino también a las reformas legales que él envió en su calidad de titular del Poder Ejecutivo, y que le han permitido alcanzar diferentes metas para el beneficio de todos los hidalguenses.
Estos resultados, dijo, no sólo son del gobernador, sino también de los legisladores, de la población y de toda una estructura gubernamental.
«Pretendo que todos dejemos huella, construyendo una mejor historia para todos por igual, con un crecimiento sostenible, bajo la consigna de combatir a la pobreza de todas las comunidades de la entidad», puntualizó.
El mandatario habló del combate a la corrupción que está emprendiendo la administración que encabeza, a través del Sistema Estatal Anticorrupción; de la eliminación del fuero Constitucional para gobernador, alcaldes y diputados locales; generación de empleos formales, gracias a la inversión privada que superó los 13 mil millones de pesos; de programas tales como «Mi primer sueldo, mi primer empleo»; del impulso a la tecnificación y acceso a créditos para el campo; así como mayor seguridad, por medio de la utilización de inteligencia y adecuada coordinación con la federación, gobiernos estatales y los municipios.
También recordó los avances que en materia de salud se han alcanzado; así como en educación, abriendo más espacios y oportunidades para todos, como es el caso de la Universidad Digital del Estado de Hidalgo (UNIDEH).
Ecología, turismo, movilidad, desarrollo social, ahorro gubernamental; en lo que significa la vida interna de la administración pública estatal, resaltó que por primera vez en la historia, cada una de las áreas ya cuentan con su reglamentación, contemplada dentro de la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo.
Respecto a los Tableros de Indicadores Estratégicos, el gobernador consideró que los secretarios se esforzaron por decrecer las cifras negativas, aunque aún se puede hacer más, por ello anunció que «la próxima evaluación de servidores públicos, no será al siguiente año, sino en seis meses, y con ello, hacer un ejercicio de evaluación cada cuatro meses, de acuerdo a la opinión de la población».
Tras ser modificada la orden del día, a fin de dar paso al diálogo entre el gobernador y los diputados, cada una de las fracciones parlamentarias, tomaron la palabra a través de diversos representantes.
Finalmente el jefe del Ejecutivo Estatal reiteró el compromiso de esta administración para mantener en un ejercicio permanente de autoevaluación de programas y acciones; con la finalidad de generar los cambios necesarios que mejor convengan a la sociedad hidalguense.
Omar Fayad abandonó el Congreso local dejando tras de sí los desechos de los gastados arquetipos pues como lo prometió hace un año, el suyo sería un gobierno austero donde los gastos superfluos y los eventos rimbombantes pasarían a la historia. Hay renglones y programas sociales que reclaman la aplicación de recursos y eso es hacer política en bien de la gente, el verdadero sustento y razón de ser de todo gobernante. La diferencia entre cumplir compromisos desterrando a la demagogia. Así de simple y sencillo.
