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Como México, no hay dos: patrióticos y cielitolinderos, pero también muy puestos (algunos) a ser los primeros en secundar la versión de que el país esconde “miles” de muertos del COVID.
Por Samuel Cantón Zetina/@SamuelCantón
Todo lo malo que sea en contra de nosotros mismos, ¡bienvenido!
Idiosincrasia, cultura, derrotismo, cinismo, ¡vaya usted a saber!, pero no hay como el mexicano para creer a ciegas en lo malo propio.
Esos “nacionalistas” multiplicaron en redes la hipótesis de 4 publicaciones extranjeras (tres de EEUU y una de España) de que México oculta cadáveres.
Casualmente (comillas al gusto), fue expuesta ¡el mismo día!
NYT afirmó que “quizás” en la capital -más de 9 mil infectados- hay el triple de muertos, y el rotativo europeo que nuestros contagios son de 620 a 730 mil.
Tras las inserciones -¡horrendos moditos!- están los enemigos de AMLO, del empresariado, de la oposición, de la resistencia (lidera Borolas) y de los medios.
A ellos se sumaron tres ex secretarios de Salud: Julio Frenk (Fox), Salomón Chertorivsky (Calderón) y José Narro (Peña).
Todos ellos fingen no saber que las estadísticas se alimentan con los reportes de los estados, y que éstos, en su mayoría, no son gobernados por MORENA.
Del número real, se sabe lo que en otros países: superan a los aceptados.
Hay una explicación: existen muchos casos -cientos, miles, ya se verá- que no fueron diagnosticados con pruebas de laboratorio. Personas cuyo deceso fue consignado como pulmonía atípica u otras patologías de vías respiratorias crónicas graves.
En España lo reconoció Fernando Simón (el Gatell ibérico), al decir que cuando el nuevo coronavirus esté controlado, se procederá a revisar los expedientes de infectados que pudieron morir del virus a partir de enero.
Los datos que en la Península se comparten con la población se vieron hace tres semanas alterados por la decisión de Barcelona (comunidad autónoma) de determinar en plena pandemia las causas de las defunciones sospechosas, para contabilizarlas o descartarlas.
E igual pasó en Wuhan.
Pero todo el mundo está igual.
Y no significa que premeditadamente se omitan decesos en las cuentas de COVID.
Las notas periodísticas aludidas carecen, además de objetividad, de rigor profesional, y México -en comparación a países como EEUU, España, Italia, Gran Bretaña y Francia, por ejemplo- capotea bastante bien la etapa crítica del violento brote.
Para muchos resulta inaceptable.
Y DE MAÑANA…
SE ANTOJA imposible el regreso a clases en junio. Moctezuma ha de anunciar ya la suspensión definitiva de las clases presenciales en este ciclo. Lo que se pueda rescatar por internet…
