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Handicap
*Ella insiste en negarse a competir en alianza; solo así ganaría
* El PRI sigue siendo el rey, pero está inmovilizado; ¿apanicado?
*Alianza PRD-PAN, complicada, asegura triunfo al tricolor
Joaquín Herrera
Mientras Eruviel Ávila ordena a aspirantes guardar silencio porque el que se mueve no sale en la foto, Josefina Vázquez Mota se posiciona y lidera –al menos en encuesta de El Universal- para la sucesión del 2017 mexiquense.
En tanto el PRD y Morena se hacen bolas con que sí y con que no buscarán una alianza para no quedar fuera de la jugada o, al menos, en el ridículo, sin figuras.
El sigue siendo el rey, conforme a la medición del diario de Bucareli 8, pero exhibe un triste escore a su favor, aunque el resto estén para llorar: si hoy fueran las elecciones (es decir, el día en que se levantó la encuesta, o entre el 30 de julio y el 2 de agosto) el tricolor obtendría el 19% de votos el PAN registraría 14.1% y el PRD 9%.
Los chiquilines, que encabeza Morena, estarían fritos. El partido de Andrés Manuel López Obrador, solo registraría 6.6% de sufragios; pero el PVEM, solo el 1%.
Esto es, que mas de la mitad de votos no parecen tener definición.
Ah, pero ciertamente, cuando se confrontan candidatos probables, Josefina Vázquez Mota –quien jura que no competirá; que no son sus planes buscar la banca que ocupó Isidro Fabela, Gustavo Baz o el legendario “Profe” Carlos Hank, ni la que ostenta hoy Eruviel Ávila.
Se trata del estado con 125 municipios que alojan a más de 15 millones de votantes, los cuales deciden la sexta parte de votos para elegir Presidente.
Y no solo eso: el Edomex es el corazón industrial del TLC en México, aloja al corredor industrial más importante de América Latina y maneja el presupuesto más elevado de una gubernatura en el país.
¿De verdad lo rechazará la ex candidata presidencial (2012) ahora que tendría la oportunidad de un desquite. Ella quedó en tercer sitio, a donde la mandó el efecto Peña Nieto, entonces el político que derrotó al más popular de la comarca latinoamericana, Andrés Manuel?
Y como entre ambos políticos la enviaron al tercer sitio, nada le gustaría más que regresar para ponerlos en aprietos.
Chepina no quiere
A Josefina le cayó como cubetada de agua helada el que vieran en su activismo reciente un “destape” para ir por la gubernatura mexiquense.
Como queda claro que Margarita Zavala le come el mandado (en encuestas y presencia) la ex aspirante presidencial puso en claro que ella no va por la Silla Grande de Palacio Nacional.
La ex Primera Dama está por las alianzas, Chepina está en contra. Hace semanas que se deslindó y dijo que no competirá por la gubernatura mexiquense. Aclaró a Ciro Gómez Leyva, quien ventiló que la ex candidata presidencial de 2012 panista, preparaba su “destape”.
Josefina se encuentra en aprietos porque difícilmente podría derrotar al PRI sin una alianza con el PRD. Ambos partidos son segunda y tercera fuerza en la entidad.
De volver a creer en las encuestas, devaluadas por fallas vistas en junio de 2016, Chepina podría corregirse a si misma y aprobar la competencia en alianza.
El problema sería que en su propio partido encontraría al menos media docena de suspirantes que le disputarían la nominación.
Entre los más activos figura José Luis Durán Reveles, quien siguió el consejo que dio Isidro favela a su ahijado y alumno, El Profe Hank: “Político pobre, es un pobre político”.
Solo que de esa frase, ha habido malas interpretaciones.
Muchos se la han atribuido a Hank González; otros a Alfonso Corona del Rosal.
También han creído que el consejo es hacerse rico en la política. Y Fabela sugería que quien llega por ambición económica, resulta un “pobre político”. Es decirme el que veía todo su quehacer para hacer mas y mas dinero, no consentido de estadista –como decía el cerebro alemán, al que admiraba, Bismark-: el estadista es el que trabaja para las siguientes generaciones, no para las siguientes elecciones”.
El dos veces alcalde de Naucalpan –considerado la segunda capital estatal- parece decidido a regresar a la política, tras un retiro al que le obligó el voto de castigo al PAN (el de Vicente Fox) que se operó como un cartel aquí.
Durán Reveles, como la mayoría de los alcaldes que han gobernado a Naucalpan, pasan a ser de sus habitantes más ricos. Y Durán cobró fama de serlo pero en el municipio con el metro cuadrado más de destinos turísticos en el país: Cancún. Le adjudican activismo, junto con Oscar García Martínez, su consejero electoral.
Vázquez Mota tendrá que decidir ahora.
Según la encuesta –que impactó a las elites del poder en el Edomex- la ex presidenciable ganaría la gubernatura si fuera en alianza con el PRD, tras ser nominada. Pero aún así, el score sería de 30.6 por ciento de intenciones del voto.
Aparentemente, esa esperanza no tiene esperanzas: la corriente hegemónica del PRD, Alternativa Democrática Nacional (ADN), rechaza la idea de ir de mosca con el PAN, cuya única “figura ganadora” –como la ven en el Palacio de Gobierno en Toluca- aún duda en pelear bajo ese escenario.
En tanto, en el PRI, los astros siguen alineados en su favor, como partido, pero faltaría ver con qué candidato o candidata entrarían a la batalla.
Mantener al Grupo Atlacomulco en el poder será más pesado que nunca.
El priismo sigue paralizado, mientras morenos, azules y amarillos, se desviven por ganarle espacios, aunque tengan poco éxito…hasta ahora.
En los tres partidos más fuertes no hay definiciones aún. En el PRI, de Enrique Ochoa Reza, a una mesa de tomar el cargo, ni pinta ni da color. En el PRD, de Alejandra Barrales, peor. Aún navega sobre la duda de si su principal carta presidencial, su ex pareja, Miguel Ángel Mancera, será el abanderado a la Grande (las presidenciales de 2018) o si se sumará como un punto más que se someterá y desaparecerá, al lado de Morena, de AMLO.
El PRD como el propio Jefe de Gobierno, temen la desaparición personal y colectiva, sin una alianza. Y esta, sería igual de fatal.
Eso frena la idea de las alianzas como la llave de la victoria electoral, perdiendo identidad.
El PAN, como el PRD, se encuentran en encrucijadas de vida o muerte, especialmente respecto a cómo pelearle al Grupo Atlacomulco el espacio electoral más codiciado del país.
Barrales no ha podido calmar las aguas broncas por su llegada a la cúpula negroamarilla y menos para imponer a una mujer externa en el estado de México, como la ex candidata presidencial panista.
La tribu (ADN) que hizo a Barrales secretaria de educación en la capital, no gusta de una alianza así.
En tanto, en el panismo estatal del tristemente célebre Grupo Tlalnepantla prefiere a una figura local. De no concertar entre ambos extremos, el panismo podría sufrir en forma de fuego amigo, como ha ocurrido en elecciones recientes.
Entre panistas no tan verdad lo que revela la encuesta. Hay más de un tirador que se cree con arrestos y derechos, mejor que una “fuereña” como ven a Vázquez Mota.
Esta, por ejemplo, el líder del llamado Grupo Tlalnepantla Ulises Ramírez. Encabeza a toda una estructura levantada hace dos décadas, cuando el panismo inició una serie de alcaldías en ese municipio, con Ruth Olvera, Rubén Mendoza Ayala, Ulises Ramírez y Marco Antonio Rodríguez Hurtado.
Aparte, el Grupo Naucalpan, de José Luis Durán Reveles; están Juan Carlos Núñez Armas y la Senadora Laura Rojas Hernández.
Gallos del PRI
Al interior del PRI destacan como gallos más probables Alfredo del Mazo Maza, coordinador de los diputados federales mexiquenses del PRI; se trata del tercer Alfredo del Mazo en línea de sucesión. Es primo del Presidente y su padre, figura entre quienes, con Arturo Montiel, parecen decidir la política doméstica, salvo la que maneja el propio Presidente Peña, como que se trata de su tierra.
El que fuera presidenciable a inicios de este siglo, fue desbancado por Peña Nieto, pero sigue siendo una de las figuras que actúan como poder tras el trono. A él deben su trono los actuales alcaldes de Ecatepec y Tlalnepantla, junto a una docena más de presidencias de la más fuertes. Esa fuerza, no es de ahora.
Las figuras que se mueven hacia la sucesión estatal incluyen a José Manzur Quiroga, secretario General de Gobierno; tan cercano a Eruviel, el gobernador, le descalifica.
El secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida, a quien se coloca con el 17.3 por ciento de intenciones del voto en la encuesta de referencia, en realidad es un relleno aparente. No se sabe de ninguna columna política que lo haya incluido ni como interesado, ni menos, como favorito. Se le ve lejano al Grupo Atlacomulco.
Carlos Iriarte Mercado, líder del PRI Estatal, como la secretaria de Educación, Ana Lilia Herrera Anzaldo y el presidente de la Junta de Coordinación Política de la LIX Legislatura, Cruz Juvenal Roa Sánchez, solo suman números.
Morena, fuera
Dígase lo que se quiera, el dedazo de AMLO para la
exalcaldesa de Texcoco –si en ningún partido hay elecciones internas, en Morena Menos- como su propuesta no quita el sueño a ningún partido mexiquense.
En el PRD o en Morena, solo pueden contar si se alían entre ellos o con el PAN.
Los demás partidos-morralla, no pesan, salvo para hacer bulto o enchinchar.