Inicio Columnas EL JUEVES NEGRO EN CULIACÁN

EL JUEVES NEGRO EN CULIACÁN

2266
0
Foto especial

Tiempo de lectura aprox: 3 minutos, 43 segundos

*AMLO elude caso culiacán y  recomienda gozar del béisbol

*Seis versiones contradictorias y un espectáculo demencial

Por Antonio Ortigoza Vázquez/@ortigoza2010

En estos últimos seis días –contando a partir del jueves 17 de octubre- ¿Alguien ha recordado los artículos 16 de la Constitución y el 150 del Código Penal Federal?

El columnista Raymundo Riva Palacio señala puntualmente que la normatividad de esos preceptos convierte, en vías de hecho, al presidente Andrés Manuel López Obrador fuera de la ley.

Se establecen penalidades que van de siete meses a 15 años de cárcel a quienes propicien la evasión a inculpados por delitos contra la salud y “tratándose de un condenado, se aumentarán a 20 años”.

Riva Palacio concluye que las declaraciones de AMLO del viernes 18 de octubre en Oaxaca –reiteración de las emitidas a lo largo de estos primeros 10 meses de gobierno- confirman “que para él, la ley es discrecional”.

Que confirma, además, que “él no tenía atribuciones legales” para liberar a Ovidio Guzmán López y que “la Fiscalía General es la que las tiene”.

A mayor abundamiento, que el presidente López Obrador “violó convenios internacionales suscritos por México como el Estatuto de Roma y de la Corte Penal Internacional”. Pero bueno, es cosa sabida que todo lo internacional se le atraganta al presidente de México.

¿UN RASHOMÓN SINALOENSE? SEIS VERSIONES DISTINTAS Y NINGUNA VERDADERA

El lunes 14 de octubre, AMLO presenta, con bombo y platillo, el Plan Nacional de Seguridad. El secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, afirma que el asunto de la inseguridad, de la violencia, “alcanzó el punto de inflexión” y que en adelante todo mejoraría.

Eso del “punto de inflexión”  es un concepto matemático, muy conocido por los militares especializados en artillería, y es cuando en la parábola de un proyectil alcanza la altura máxima y comienza la caída. Del cálculo matemático específico hecho por el artillero depende que ese proyectil alcance o no el blanco.

Es un enigma de cómo fue que el secretario Durazo, que no es artillero ni matemático, llegó a despejar la incógnita del “punto de inflexión” de la violencia criminal que padecemos, pero poco más de 48 horas después, se pudo observar con crudeza que el “punto de inflexión” está lejos de alcanzarse: la violencia asciende vertiginosa, con la matanza de policías en Aguililla, Michoacán e Iguala, Guerrero.

El presidente acudió sus “mañaneras” tan campante, haciendo circunloquios ante reporteros no muy inquisitivos, o bien eludiendo a los que tratan de cumplir con su trabajo de pedir explicaciones.

Y llegó el Jueves Negro con Culiacán tomado literalmente por el famoso Cártel de Sinaloa  que mostró su poder, su coordinación tipo militar de altos vuelos, con el cordón de sicarios tomando las salidas de la ciudad para impedir cualquier intento de “sacar” a Ovidio Guzmán López, la toma del aeropuerto, con asedio a las instalaciones militares y a la zona de viviendas del Ejército con la fuga de 60 reos de alta peligrosidad, y la amenaza de asesinar indiscriminadamente a civiles, como realmente sucedió.

Poco después de las dos de la tarde comenzó el estallido de violencia: fotos y videos de celulares de ciudadanos aterrorizados nos mostraron autos abandonados en plena calle y personas yaciendo ensangrentados en el pavimento, inmóviles. Pero seis días después no hay recuento, al menos oficial, del número de ciudadanos inocentes asesinados.

El número total de víctimas ha oscilado de ocho a 13, de 11 a 14, para escoger.

El mismo viernes 18, el experto en temas de seguridad, Alejandro Hope, publicó un artículo donde sugiere la tendencia oficial de ocultar la cifra de víctimas de la violencia. Quizá por ahí está la explicación.

Y de pronto se nos presenta en la memoria aquella celebérrima película (al menos para fans del “cine de arte”) de Akira Kurosawa, Rashomón, donde un matrimonio rico es asaltado en un camino solitario y la esposa violada. La historia se cuenta en diversas y contradictorias versiones, incluyendo la de los bandidos,

Ese mismo jueves, el presidente López Obrador fue a tomar el avión a Oaxaca y eludió hacer comentario alguno sobre un estallido de violencia en Culiacán de tales dimensiones, que repercutía en todo el mundo con las “benditas redes sociales” y con los más prestigiados medios informativos de Estados Unidos y Europa tomando cartas en el asunto.

Una analogía puede hacerse con el dos de octubre de 1968 en Tlaltelolco: en este 2019 aún no se tiene el número oficial de muertos en la terrible matanza de civiles en la Plaza de las Tres Culturas. AMLO nunca ha tenido pronunciamiento alguno al respecto. Y de la misma  forma, todo indica que no hay ni habrá cifra oficial de las víctimas civiles del Jueves Negro de Culiacán.

En 1968, el presidente Gustavo Díaz Ordaz se fue a Guadalajara y desde ahí lanzó el mensaje: “Una mano está tendida, de ellos (los estudiantes) depende si la mano es estrechada o queda en el aire”. Los miembros del Consejo Nacional de Huelga (CNH) respondieron: “A esa mano habrá que hacerle la prueba de la parafina”.

Desde Oaxaca, bombardeado por preguntas de parte de algunos reporteros, quienes en todo momento enfrentaron los intentos de  bloqueo por los paleros con credencial de reporteros, el presidente Andrés Manuel López Obrador optó por… ¡hacer una crónica del “playoff” entre Yanquis de Nueva York y Astros de Houston!

El viernes 18 siguiente, en la “mañanera” que tuvo lugar en Oaxaca, después de repetidos intentos por “explicar” los sucesos de Culiacán y donde emitió los pronunciamientos que Riva Palacio sostiene son evidencia de autoinculpación presidencial de violaciones a la Constitución y la legislación penal aplicable, el primer mandatario echó mano de una, digamos, estratagema escapista y se puso a hacer ¡una crónica beisbolística!

Parece un “sketch” del inolvidable Jesús Martínez, “Palillo”, pero no, es una pieza oratoria del presidente López Obrador que merece ser reseñada por historiadores que se hagan cargo de la historia del lopezobradorismo en el futuro próximo.

Dijo: “Sinaloa es un estado que ha destacado en el deporte… el sábado hubo juegos de beisbol… un juegazo, iban en la novena entrada, ganando los Astros 4-2, y con jonrón con uno en base los Yanquis empataron…y entró nuestro paisano Osuna, el relevista y controla. En el cierre de la entrada, vino Altuve y pega­­­ jonrón, porque si no habría extra-inning. Así llegó Astros a la Serie Mundial, empieza mañana y creo que en Sinaloa sí les interesa también… tenemos qué pensar que la vida es mucho, mucho más que un mal momento… ¡ya! Hay qué ser felices…”  (¡Textual!)

(Si eso no es esquizofrenia… como que se le parece mucho).

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here