Inicio Columnas Lo que sigue: AMLO no quiere derrotar; quiere derrocar a MAM teme...

Lo que sigue: AMLO no quiere derrotar; quiere derrocar a MAM teme ser un cero a la izquierda…de Morena

“Con PRD, ni a la esquina”: AMLO; Martí. brazo vengador Morenos y heráldicas amarillas, se reparten el pastel

1383
0

Tiempo de lectura aprox: 6 minutos, 4 segundos

 DFiéndete

Joaquín Herrera

Ya lo dijimos en este espacio: Andrés Manuel viene por la revancha. No quiere derrotar; quiere derrocar a Miguel Ángel Mancera, MAM.

Es el principal escollo para su sueño presidencial, del “ahora sí, la tercera es la vencida” del 2018.
Y ya encontró el camino –al menos el tabasqueño así lo cree- en un tercio de bancas de la Asamblea Legislativa del DF.
Esta –que sueña ser Congreso formal si avanza la “congelada” Reforma Política del DF- deja de ser un departamento más al mando del Jefe de Gobierno.
Si alguien lo sabe que así es, que la ALDF no es lo autónoma que debería, es el tabasqueño que así gobernó.
La división de poderes, es un estorbo de “las instituciones”. Al menos para las que mandó “al diablo” el dos veces aspirante presidencial, que va por la tercera.
El optó por evitar ese paso estorboso de andar promoviendo leyes en lugar de actuar, su estilo.
Como recordará usted, AMLO recurrió mejor a los bandos, como gobernó  Enrique Tierno Galván, en el Madrid post franquista. Su radicalismo marxista lo alejó del PSOE al que se unió y murió como una leyenda de la izquierda.
Pero ahora que la vida pareciera le juega una mala pasada, AMLO ya no ponderará ya verá que solo con leyes votadas en el parlamento se atiende al mandato popular.

MAM teme ser un cero a la izquierda… de Morena

 En los hechos, el Jefe de Gobierno tendrá que hacer valer atribuciones de Jefe de Gobierno que la ley le confiere. Claro, si no quiere ser un cero a la izquierda…de Morena.

Ahora sí, el Legislativo del DF se pondrá exigente.
Ya nada de que se archiven por doce años, los trastupijes como los que le achacan a AMLO, cuando Jefe de Gobierno en los segundos pisos.

Tampoco se valdrá cobijar errores como los de Ebrard en “el robo del siglo” en la Línea 12 del Metro.
Ahora, Morena no se puede decolorar, pasando a ser un PRD disfrazado y tolerarlo todo.

Ya nada de que están bajo reserva (es decir, prohibido saber de su contenido, los manejos y verdades que pueden llevar a la cárcel a más de uno por los segundos pisos) y ahora pedirán cuentas de todo. No como antes.
Así, normas diversas estarán sujetas a que las apruebe, a su manera, quien a todas luces será ahora, el Legislativo capitalino, depositadas, de alguna manera, en una persona.

Ya se sabe que el ejercicio del poder (Legislativo, Ejecutivo o Judicial) depositado en una persona es más cómodo.

Lejos de “traidores a México”

AMLO tiene razón en no querer juntarse con esos legisladores a los que cree entregados a Satán. Es decir, al PRD de Los Chuchos que firmó el Pacto por México, que debía llamarse, el Pacto Contra México.

Ahora que Morena revive el pasaje bíblico de Moisés cuando recibe las Tablas de la Ley o Los Diez Mandamientos en el Monte del Sinaí y comunica a su pueblo que debe seguirlos, so pena de acabar en el infierno.
Así se asume Morena, si observamos las palabras de Martí Batres. Es la voz de AMLO que quiere castigar  a los blasfemos, a los idólatras de dioses falsos y -eliminar, sería “ideal”- a los aliados de Mancera, Los Chuchos y demás partidos.
¿Alguien dudará cuánta razón tiene?
Morena se ha definido: los priistas, los panistas y demás, son traidores a México, corruptos y voraces, como “reveló” en un ataque de sinceridad, el “líder” material de Morena, Martí Batres.

Morena; no hay más ruta que la nuestra

-¿Morena es la única opción?

Eso pregunta Carlos González, de Radio red, la tarde del viernes 13, para establecer que entendió bien a Batres.

El líder oficial de Morena lanzó su decálogo de la nueva era.
Moisés, perdón, Martí, por encargo de Dios, bueno, por lo menos de AMLO, repitió que no hay más opción para los mexicanos que se ubiquen en la verdad.
Ya otra “divinidad”, aunque terrenal, lo dijo: “no hay más ruta que la nuestra”, fue la sentencia de David Alfaro Siqueiros a sus opuestos y seguidores por igual.

Y, salvo que se purifiquen en las aguas del río Jordán, perdón, dándose de alta en Morena, como lo han hecho grandes mexicanos como Manuel Bartlet y la bancada de senadores del PT se quedaría en el limbo.

Con el PRD, ni a la esquina”

Así que, “con el PRD, ni a la esquina”, es como pinta su raya el dos veces candidato presidencial, parece que en el PRD no todos quieren creerle.

Al menos no el que en el PRD considera su máxima carta, Miguel Ángel Mancera.
El peón político del Sol Azteca, y as para pelear las presidenciales del 2018 –Carlos Navarrete dixit- no responde sino como quien oye una broma.

El líder moral del eclipsado Sol Azteca, Mancera, prefiere actuar como Moctezuma ante Cortés: en lugar de combatir la invasión a su imperio –dicen que la mejor defensa es el ataque- MAM le manda al amo de Morena un ramo de olivo.

El Jefe de Gobierno le jura que aún cree más en el amor que los une que en la guerra, por más electoral que esta sea.

Para la capital, lo más seguro es que ni el uno cree su propio rosario de plegarias ni el otro lo que oye, salvo como lagrimas orales de cocodrilo.

En palabras llanas, se ve que el llamado por sus malquerientes, Mesías Tropical  -por Diosito que no tiene nada de Mesías- solo quiere atender el llamado de su pueblo para rescatarlo del Apocalipsis tricolor, amarillo, rojo, verde, azul…

Bueno, que también sea el reto de Mancera oír a su grey, eso es otra cosa. MAM dice que él iría a la guerra –electoral, claro- por el 2018, sólo si su pueblo se lo pide…Ah, pero “el pueblo” ya está etiquetado en el diccionario de todas las izquierdas. Tiene nombre y apellido.
Eso no fue lo que ocurrió a Marcelo Ebrard: aunque ganó en las encuestas, cuando su maestro le dijo que el pueblo no le perdonaría su “blasfemaba” e insistía en lanzarse a La Grande; el entonces  Jefe de Gobierno, comprendió aquello de que “donde manda capitán”…
Y aceptó la sentencia de “el pueblo”. Y, en términos de galleros, “se abrió” (se retiró) en lugar de “abrir” (pelear).

Hoy viene el mismo episodio, salvo con diferente fecha y uno de los “contendientes”.
La moneda –que no dos gallos- revolotea en el aire

Desplazaditos y heráldica suertuda, comparten pastel

Mientras tanto, los Bejarano, los Monreal, los Moreno y los Moctezuma, entre la heráldica con suerte, comparten el pastel, en espera de tiempos mejores.

Los Bejarano y los Padierna, parecen los corderos sacrificados: doña Dolores Padierna, y René Bejarano, tuvieron que simular que peleaban de lado de los buenos.

Es decir, el perredismo de Mancera. Luchaban por las delegaciones que se les encargaron, pero habían sido ninguneados por las dirigencias perredistas. Y los aplastaron en su último consejo y quedaron fuera de todo.

La “respuesta” de la pareja Bejarano-Padierna fue hacer como que les cumplo a quienes simulo que me mandan.
Y en esas simulaciones, “casualmente” se perdieron las delegaciones a su cargo.

Para el líder del PRD en el DF, Raúl Flores, esos son parte de “los traidores”.

Claro, no puede imaginarse que el motivo sean fallas de quienes todo lo dan por su pueblo. Bueno, siempre que no se les pida “demasiado”.

Así, el tsunami llamado Morena, les arrebató a Chuchos, Bejaranos y manceristas, sus cotos.
Cuauhtémoc, en donde fue delegada Dolores Padierna, cuando la vida sonreía a su heráldica, ahumada por un empresario argentino; aún así, su jefe, AMLO, les perdonó; y ella fue dos veces diputada y senadora; pero ahora vio a ese coto de poder, cambiar. ¿O será que fue cedido “voluntariamente” a Morena?
Igual ocurrió a su heráldica en Azcapotzalco; eso a pesar de que el hermano de René, Elio Bejarano, ha operado a grupos de protesta como los de la CNTE, por encargo de AMLO, para fastidiar a Mancera. Pero se necesitaba un sacrificio en los Bejarano Padierna y lo apechugaron:
Antonio Padierna, tuvo que ceder como candidato a jefe delegacional de Azcapotzalco. Enfrentó –no en serio- a otro apellido de prosapia, mas valioso ahora que está en Morena.

Y el poder del cielo pudo más que el de la tierra: Pablo Moctezuma, candidato por Morena, resultó el ganador.
Así ¿cómo no alimentar la idea de traición que invoca Raúl Flores?

Los Moctezuma, han tenido posiciones relevantes durante la Colonia. En los finales del siglo XX, uno de los suyos, Esteban, fue Secretario de Gobernación, con Ernesto Zedillo.
Don Neto –hay que recordarlo- fue quien pactó en 1996 con el PRD de Cuauhtémoc de poder por gobernabilidad.

Así, AMLO, entonces candidato a líder del Sol Azteca, entonces en manos de Porfirio Muño Ledo, cambió sus ataques.

Todo el PRD, que diario pedía la cabeza del Presidente, se trasladaron al papel que no tuvo el PRI, el partido de Zedillo: todos al unísono, fueron desde ese año, corifeos de Zedillo. Mientras, entre priistas, acusaban a “su presidente” de traidor.
Así es la historia. Un zedillista, es hoy una pieza de Morena que gana el gobierno de Azcapotzalco. Pierden los Bejarano Padierna. Ellos, nada tienen que dolerse porque sus enemigos, los que los expulsaron del paraíso perredista, hayan perdido.

Pablo Moctezuma, será delegado moreno.

Otro apellido afortunado: los Moreno Rivera

El 7 de junio, el Partido de la Revolución Democrática refrendó para un apellido suertudo el gobierno de Venustiano Carranza con Israel Moreno, hermano de Julio César Moreno, quien fue jefe delegacional de 2006 a 2009.

Julio César es quien pone y quita.
A esos cotos reservados para apellidos famosos, atribuyó Carlos Navarrete la derrota. Mancera se autocrítica y dice que fue por elevar el costo del boleto del Metro, radicalizar medidas del Hoy no Circula y haber parado la línea 12 del Metro. Es decir, el auto flagelo, para enmascarar los yerros de no hacer valer derechos de la población para transitar, ante vándalos.

Escurre el bulto de que el DF es un basurero, sin servicios de limpia o de mantener un transporte de tercera y desentenderse del suministro del agua potable que no conocen entubada al menos un millón de capitalinos.

Pero en VC a la heráldica afortunada no la deja la fortuna por nada:
Julio César Moreno Rivera, directivo del PRD a nivel capitalino a finales de los años 90; asambleísta 2003-06 y 2009-12, ve llegar a uno más de su familia.
Su fuerza se ve y se siente, incluso fuera. El amo de Álvaro Obregón, Leonel Luna Estrada, es otro hombre fuerte que ha incluido en varias elecciones y como “cuota” a aliado y amigo de Carranza, colocó a Israel Moreno Rivera en su “gabinete”, este que va de salida ahora.

La fuerza de los Moreno, se demuestra con que en 2012, dos hermanos Moreno Rivera, llegaron a San Lázaro.
Hoy, por lo pronto, ni el tsunami Morena molesto a los Moreno, homónimos.

 

 

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here