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* Con su brújula política extraviada, el ex regidor de Morena insiste en cometer a diario toda serie de dislates y además de enfrentarse con los usuarios de las redes sociales, pretende que empresas globales como Facebook, impidan la difusión de sus fotografías. Urge que alguien le aconseje al “doctor”, bajarse de un ring donde a cada round sale vapuleado
Por Antonio Ortigoza Vázquez/@ortigoza2010
El ahora ex regidor del Ayuntamiento de Pachuca, Pablo Vargas González, sigue trabajando con tesón para colocarse como el «Garrik» de la política hidalguense, pese a no contar con el talento histriónico necesario del legendario actor inglés.
El ex regidor ha dado lances plenos de ridiculez en ese sentido: Publicó en redes sociales dos mensajes que de inmediato generaron lo mismo carcajadas que levantamiento de cejas por lo asombroso de la conducta del «doctor», empecinado en convertirse en el hazmerreír de todo el estado, carrera que emprendió desde la instalación del Cabildo de Pachuca.
Primero hizo circular en redes su petición de licencia como regidor, con la intención evidente de competir por una candidatura a diputado federal por Morena, aunque tuvo la ocurrencia de alegar otras «causales». Pero comienza por señalar que pidió licencia «al cargo que asumí por derecho constitucional, no como alguna negociación espuria». La aclaración no pedida es intrigante: ¿Alguien divulgó alguna «negociación espuria»?
Enseguida hace una afirmación no menos intrigante: «La licencia se debe a que el Ayuntamiento ha regresado con fuerza autoritaria que reduce los espacios políticos con el atropello sistemático a toda legalidad existente y, de antemano, el trabajo constructivo está cancelado, pero principalmente porque buscaré el lugar donde pueda aportar de mejor manera contra la hegemonía del cacicazgo y en la lucha contra la corrupción en Hidalgo y en favor de la Cuarta Transformación de la República». (¡Sopas!)
Apenas arranca el nuevo Ayuntamiento de Pachuca y ya descubrió «atropellos» que no cita con datos y peor aún ¡La constitución de un “cacicazgo”, figura política cuya realización, como es de elemental conocimiento, lleva algún largo tiempo construir!
¿TEORÍA CONSPIRATIVA?
Pero el ex regidor Vargas remata su jornada con otra «perla» que no tiene desperdicio: arremete contra Facebook, y puede suponerse que lo hizo para desquitar el mal humor que le atosiga desde que se conocieron los resultados de los comicios municipales, cuando perdió la presidencia municipal de la capital del estado.
En otro mensaje en redes, Vargas González escribe cuatro veces la frase «¡NO AUTORIZO!» y enseguida una ruidosa advertencia a sus lectores: «¡¡ Recuerda, mañana comienza la nueva regla de Facebook que permite usar tus fotos!! ¡Recuerda que el plazo es hoy!! ¡¡ Se puede utilizar en juicios contra todo lo que has publicado se podrá publicar (sic) a partir de hoy! Incluso mensajes eliminados. No cuesta nada más que un simple copiar/pegar, mejor estar seguro que ser vulnerado».
Prosigue Vargas con el mismo tono tremebundo: «No doy permiso a Facebook ni a ninguna organización asociada a Facebook para usar mis imágenes, información, mensajes, fotos, mensajes eliminados, archivos etc.»
Y remata: «Por las dudas?? No comparto!!!!!!!! No autorizo.» (Zuckerberg debe estar muy preocupado)
Uno de los lectores comentó en las mismas redes: «¿Y este señor tiene el grado de doctor?»
Podría terciarse, como colofón, que a don Pablo solo le falta colocarse en el corazón de la plaza Juárez y gritar a los cuatro puntos cardinales de Pachuca, como en el poema de Juan de Dios Peza: “¡Yo soy Garrik¡”. O al menos aspirante a clown…