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*Ganar el 2018, sumar al PRD a la candidatura azul
*Pobre Veracruz: tan lejos de Dios y tan cerca de los Yunes
De la redacción
CD de México, 26 de abril/2016 (agencia acento)
El PAN de Ricardo Anaya, quiere, sueña sumar al PRD a la candidatura “azul” para derrotar al PRI en las presidenciales de 2018.
Joven líder de la segunda fuerza político electoral del país, cree que se llevará “carro completo” (como hacía el PRI “de antes”) en las elecciones de doce gubernaturas en este 2016. Lo cree factible y lo declara en entrevista que publica hoy El Universal.
Parece que la vida (política) es un sueño y los sueños, sueños son.
El líder blanquiazul, declaró a ese rotativo que “vemos con apertura la idea de ir en una alianza con otras fuerzas políticas de cara a la elección presidencial de 2018”.
Confiesa que no ha dialogado en ese tenor con el líder del sol azteca, Agustín Basave. Pero cree que lograría convencerlo de la alianza.
No confiesa, sin embargo en forma directa, que las figuras del PAN serían las que encabecen esa coalición, y que la nominación de la candidatura él la ve entre Rafael Moreno Valle Rosas (gobernador producto de la alianza PAN-PRD de 2010 en Puebla) y Margarita Zavala. Eso se percibe en el ánimo del panismo.
Cree, no lo asegura, que de ganar Veracruz, sería un golpe muy favorable hacia el panismo, ya que se trata de la entidad con más votos para elegir presidente, solo después del Estado de México y la capital federal.
En la entrevista que publica hoy El Universal, Anaya no quiso revelar en qué estados se cree más seguro el PAN, para no desalentar al resto, pero él supone que no está lejos que gane doce de doce gubernaturas en juego este año.
El PAN quedó en tercer sitio en las últimas elecciones presidenciales y, conforme a analistas, ha perdido más de un tercio de votación desde 2012, en que su candidata, Josefina Vázquez Mota, alcanzó el 25.4% de la votación, abajo del PRD, del entonces candidato Andrés Manuel López Obrador, con 31.6%, ambos derrotados por el priista, Enrique Peña Nieto, con 38.1% de votación.
En Veracruz, el PAN y la alianza PRI-PVEM empataron, con 33.63% y 33.65%, respectivamente, en la votación general.
Hoy, un tercer competidor, Morena, un desprendimiento del PRD, manejado por Andrés Manuel López Obrador, parece fraccionar al ánimo antipriista. Adicionalmente, cuenta la presencia de un desprendimiento panista, la candidatura de Juan Bueno Torio, del PAN, en calidad de independiente, que es probable afecte al voto blanquiazul.
Es en ese escenario en donde el voto de premio y de castigo, decidirá hacia a donde se inclinará el voto jarocho, cuyo gobernante, el priista Javier Duarte, es el mandatario con más negativos, señalado por el propio líder tricolor, Manlio Fabio Beltrones para que rinda cuentas a su pueblo, cuando se le señala de ladrón defraudador y voraz. Además, el estado con más violencia que no deriva del crimen organizado solamente, sino de policía criminal.
Los casos de violación, asesinatos de mujeres, de periodistas y la soberbia en su máxima expresión, pueden pesar mas que los positivos que el candidato priista, Hector Yunes, pueda absorber, a pesar de este escenario. En tanto, el opositor, Miguel Angel Yunes, quien fuera el prospecto presidencial de La Maestra, Elba Esther Gordillo, señalado como coleccionista de propiedades en EU, tiene qué remontar todo un historial que compite así en negativos con los del gobernante veracruzano al que quiere suceder para cambiar la suerte del estado… ¿para bien?
Pobre de Veracruz: tan lejos de la paz y tan cerca de los Duarte y los Yunes.
Pobre del PAN, tan cerca del PRD (su supuesto enemigo ideológico) y tan lejos de su fundador, Manuel Gómez Morín.