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«Si lloras porque no puedes ver el sol, las lágrimas no te dejarán ver las estrellas»
Rabindranath Tagore
Por Samuel Cantón Zetina
Así como van las cosas, Tabasco no tendrá más opción que dejar correr al coronavirus.
Hay una ciudadanía que por cualquier razón o pretexto, no respeta órdenes ni restricciones.
La alta movilización -repite una y otra vez la secretaria Silvia Roldán- está “totalmente vinculada” a la propagación de los contagios.
El único futuro posible, entonces, es que continúen aumentando los casos y muertos.
La única posibilidad de contener al virus estaba en seguir al pie de la letra las indicaciones.
Y no lo hicimos.
Empezando por AMLO y Adán, detrás suyo Gatell y Roldán, todos coinciden: el Edén perdió la disciplina.
“¿Queremos hospitales colapsados, más contagios y más muertes”?, reprochó el gobernador a los irresponsables, “que no faltan”, que en la etapa más complicada de la emergencia pusieron en riesgo su salud y la de todos (tuit 13 de mayo).
Si no importamos al ejército chino, con su pesada carga represiva, para que venga a meter en orden a los chocos, no hay nada qué hacer por ese lado.
Esa, suponemos, sería la primera gran determinación: no hay herramientas ni armas para regresar al principio y reimplantar con rigor los procedimientos del caso.
Gatell amagó cuando dejó entrever que podría sellar a Villahermosa -ni entradas ni salidas-, como en Wuhan, pero no se atrevió.
No se hizo en su momento, y punto.
Queda, pues, la segunda alternativa: que el estado siga su marcha con el COVID colgado del cogote, muy probablemente, ahí sí, con los 2 mil muertos pronosticados para agosto y medio millón de contagios de aquí a fin de año.
En ese escenario, la prioridad volvería a ser que los hospitales y las Unidades de Cuidado Intensivo no desborden.
Con el plasma y test en cantidades insuficientes (200 al día, con todo y que Tabasco es el que más hace: 4.8 por cada 1000 habitantes) como paliativos.
Hace tres semanas -del 22 al 28 de mayo- se tuvo en nosocomios momentos críticos al atender a casi ¡500 pacientes!
Y apenas hace unos días, en entrevista con Tabasco HOY Radio, Roldán declaró: “seguimos creciendo en casos; 150 infectados diarios; estamos en producción de positivos de manera importante…”
Por si hiciera falta, al COVID-19 se están uniendo aquí los virus del dengue (las lluvias exacerbaron al aedes aegypti) y de la influenza, y ya hay conocimiento de alguna persona atacada -no en el terruño- por dos al mismo tiempo.
El mayor peligro, por su densidad poblacional, continúan siendo Centro y Chontalpa (sus semáforos epidemiológicos están al máximo de intensidad de rojo).
A aguantar vara.
Y DE MAÑANA…
AHORA SALIÓ Gatell con que la curva se volvió meseta, y que por eso venimos (en los últimos 15 días) planos y tendidos con los contagios, y no bajan. ¡Ah, y que al pico tampoco llegamos todavía! Hijuesú…
