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Por: Samuel Cantón Zetina / @SamuelCanton
Ojalá México no llegue al extremo de depender del confinamiento de la población, porque vamos a estar en graves problemas.
No es nada más que el gobierno disponga el encierro obligatorio, sino -lo más importante-que se acate (China lo logró, porque al ser un régimen comunista, impuso a rajatabla la inmovilización).
De otra forma, el éxito puede retrasarse meses o años, con la ruina económica del país.
Los paisanos creen que se trata de salvarse individualmente, sin comprender que el gran peligro es que COVIT-19 se propague y cobre fuerza.
No ayudan, quienes como Bolsonaro, Salinas o Barbosa opinan (el brasileño) que el virus le hace los mandados; “solamente” victimizará al 10%, o que los pobres “son inmunes”.
Omiten, irresponsables, que potencialmente todos somos portadores, y que al incumplir la orden de guardarnos, ponemos en peligro inminente a personas vulnerables como los ancianos y enfermos de diabetes, hipertensión u obesidad (México lidera los tres).
En España, el 67% de los más de 4 mil muertos eran viejos de más de 80 años, y las estadísticas de fallecidos en Italia andan también por ahí.
Con más de 6 mil muertos, en este último la gente ignoró primero el exhorto para permanecer en sus domicilios.
Hoy, campeón de muertos por la pandemia, vive bajo un virtual Estado de Sitio.
En España, han sido detenidos más de mil, y sancionados 102 mil con tres mil euros ($72 mil), por intentar burlar la restricción.
A lo largo y ancho de las ciudades, y en los controles carreteros, las policías vigilan que la gente solo esté en las calles por básicos o emergencias. En Coruña, un tipo que por internet alquilaba perros para violar la regla -se permite sacar un rato a pasearlos- tendrá que pagar 5 mil euros de multa.
¿Funcionaría en México?
En Villahermosa, donde inconscientes rompieron cadenas de canchas deportivas para seguir como si nada, y las cintas de ¡alto! son puestas y quitadas en parques, seguro que no…
