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Escribe Ruth Zavaleta
¿Qué motiva que un hombre se ensañe con la primera y, luego, con su segunda esposa, pegándoles con el puño cerrado en la cabeza, picándoles las piernas con un cuchillo y cortándoles los dedos meñiques para guardar un trofeo? La impunidad, la falta de procuración de justicia, la discriminación y, tal vez, la locura . No es un invento, es real, es la experiencia de dos jóvenes mujeres que la violencia de genero unió. La primera tuvo que huir junto con sus padres después de que el victimario les quemara su casa dos veces y les robara su tesoro más preciado: su hijito. A pesar de haber denunciado penalmente desde el 2019 ¿Qué hizo la autoridad? Nada. Ahora pelea la custodia para recuperar al infante.
La segunda esposa, que cuidaba al hijo de la primera, logró huir en tres ocasiones y después de denunciar dos veces, recorrer juzgados y buscar refugio por varias semanas, por fin fue recibida en un austero albergue y ahí está escondida. Sólo su abuela la apoya a pesar del miedo que tiene a las represalias.
Pero en ese lugar no le va bien, su hijito de pocos meses de nacido llora constantemente en el pequeño cuarto que tiene solo una cama y un baño, como en una cárcel ¿Por qué son ella y el bebé los que están ahí? ¿Por qué tiene que suceder esto? ¿Por qué no se acaba la violencia contra las mujeres? Lamentablemente esta historia se repite y las autoridades actúan nula o deficientemente ante las denuncias, los problemas crecen y las mujeres terminan asesinadas.
Después de un largo peregrinaje, al parecer, por fin las dos jóvenes madres encontrarán apoyo en la Secretaría de la Mujer del Estado de México, ¡por favor!
La violencia contra las mujeres en México es un hecho constante y creciente. Paradójicamente, al paralelo que se ha logrado el reconocimiento de la paridad política constitucional y las mujeres ejercen mayores espacios de poder, los diferentes tipos de violencias contra las mujeres siguen manifestándose con mucho mayor saña, principalmente, la violencia feminicida.
Cabe mencionar que, aunque en la siguiente gráfica no se muestran los datos de “Homicidios culposos”, éstos también se incrementaron; en ese universo de datos se registran, entre otros delitos, los suicidios. El daño que sufren las mujeres por violencia reiterada puede motivarles diversas secuelas, una de ellas es la depresión y como consecuencia, algunos suicidios pueden tener ese trasfondo, pero no hay forma de analizarlo porque no hay investigaciones tan especializadas y porque es tan grande la cantidad de homicidios de todo tipo, que no hay recurso que alcance para hacerlo.
| Año | Victimas Homicidios Dolosos | Victimas Lesiones Dolosas | Victimas Feminicidio | Delitos Feminicidio |
| 2015 | 1,735 | 56,422 | 426 | 411 |
| 2016 | 2,190 | 62,848 | 645 | 605 |
| 2017 | 2,536 | 66,724 | 765 | 741 |
| 2018 | 2,765 | 61,957 | 913 | 891 |
| 2019 | 2,876 | 66,345 | 968 | 934 |
| 2020 | 2,783 | 57,495 | 969 | 940 |
| 2021 | 2,746 | 62,362 | 1,004 | 966 |
Presuntas Víctimas Mujeres de Violencia y Feminicidio (2015 a 2021).[1]
La violencia contra las mujeres no disminuyó ni siquiera durante el periodo de confinamiento por la pandemia del COVID-19, la siguiente gráfica muestra los delitos contra la libertad sexual por año, pero al revisar el desglosado por mes, se observa que, durante marzo a junio del 2020, que fue el periodo de confinamiento, hubo 90,314 llamadas al 911 para denunciar violencia contra la mujer (26, 923 más que en el mismo periodo del 2019).[2]
| Año | Abuso Sexual | Acoso u Hostigamiento | Violación con Violencia Física o Moral | Violencia de Pareja |
| 2016 | 3,925 | 3,179 | 3,929 | 159581 |
| 2017 | 3,797 | 4,415 | 3,576 | 202,177 |
| 2018 | 5,078 | 6,058 | 3,654 | 295,471 |
| 2019 | 5,347 | 7,470 | 3,874 | 274, 487 |
| 2020 | 5,003 | 8,376 | 3,554 | 236, 562 |
| 2021 | 6,169 | 9,505 | 3,585 | 259, 452 |
Fuente: Elaboración propia con base datos diferentes instituciones.[3]
De los diez países más violentos de la Región de América Latina, desde 2015 a 2020, México ocupa el segundo lugar*:
| País | 2015 | 2016 | 2017 | 2018 | 2019 | 2020 |
| Argentina | 235 | 254 | 249 | 258 | 252 | 251 |
| Bolivia | 96 | 104 | 110 | 130 | 117 | 113 |
| Brasil | 1662 | 1582 | 1867 | 2048 | 1738 | |
| Colombia | 57 | 208 | 228 | 226 | 182 | |
| El Salvador | 274 | 256 | 271 | 232 | 113 | 73 |
| Guatemala | 179 | 180 | 187 | 159 | 139 | 119 |
| Honduras | 312 | 264 | 235 | 218 | 295 | 227 |
| México | 411 | 604 | 742 | 893 | 945 | 948 |
| Perú | 103 | 105 | 116 | 150 | 148 | |
| República Dominicana | 98 | 108 | 119 | 165 | 148 | 132 |
Elaboración propia. Fuente: La Comisión Económica para América Latina (CEPAL)[4]
Feminicidios en América Latina (2015-2020). *No se contempla Venezuela porque no hay datos.
Los motivos del incremento de la violencia no se encuentran en la falta de leyes. México ha suscrito y ratificado todos los acuerdos, convenciones, metas y tratados internacionales como parte de los Estados de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En consecuencia, se ha reformado la Constitución, se han creado leyes nuevas e instituciones con presupuestos etiquetados para garantizar el derecho a una vida libre de violencia de las niñas y mujeres, se han armonizado las normas locales y se han creado sistemas contra la violencia. De hecho, México es el único país de la región que cuenta con un protocolo único para frenar la violencia: la Declaratoria de Alerta de Violencia de Género (DAVG), pero todo parece indicar que no es suficiente.
Las políticas públicas y programas para evitar la discriminación contra las mujeres y frenar la violencia, son un fracaso. Hasta noviembre del año pasado, 219 municipios de veintidós Estados de la República tenían declarada Alerta de violencia y Veracruz y Guerrero tienen doble porque, además del incremento de la violencia, las leyes son deficientes u omisas para garantizar los derechos de las niñas y mujeres. En la siguiente gráfica se muestra las primeras cinco Entidades que cerraron el 2021 con mayor índice de feminicidios. Al respecto vale la pena mencionar que sólo la Ciudad de México no tiene declarada la Alerta.
Tabla 4
| ENTIDAD FEDERATIVA | 2018 | 2019 | 2020 | 2021 |
| Estado de México | 114 | 123 | 151 | 143 |
| Veracruz | 101 | 104 | 84 | 69 |
| Jalisco | 32 | 61 | 66 | 68 |
| Nuevo León | 79 | 67 | 67 | 65 |
| Ciudad de México | 43 | 71 | 64 | 65 |
Elaboración propia. Fuente: datos que son monitoreados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública cada mes.
La violencia contra las mujeres tiene su origen en la cultura de la discriminación, de la formación patriarcal desde la familia. Transitar hacia una cultura de la igualdad implica reconstruir los valores morales, éticos y sociales, por lo tanto, no podemos creer que sólo cambiando leyes o incrementando penas vamos a lograrlo. Al respecto, Amartya Sen escribió: “El éxito de la democracia no consiste únicamente en disponer de la más perfecta estructura institucional imaginable. Depende ineludiblemente de nuestros patrones reales de conducta y del funcionamiento de las interacciones políticas y sociales.”[5] Y eso es necesario para que las historias de las jóvenes que describí, no se repitan.
[1] Fuente: Elaboración propia con base en los datos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (diciembre de 2015 a diciembre de 2021)
[2] Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, [En línea], https://www.gob.mx/sesnsp [Consulta: 2 de febrero del 2022
[3] Datos monitoreados por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública. [En línea], Info-delict-violencia contra las mujeres-Dic20.pdf – Google Drive [Consulta: 5 de febrero del 2022]
[4] CEPAL/CEPALSTAT/ESTADISTICAS E INDICADORES/ TEMAS TRANSVERSALES/GÉNERO/VIOLENCIA CONTRA LA MUJER/NÚMERO DE FEMINICIDIOS O FEMINICIDIOS [En línea], https://statistics.cepal.org/portal/databank/index.html?lang=es&indicator_id=2780&area_id=544&members=213%2C29185%2C29186%2C29187%2C29188%2C29189%2C29190 [Consulta: 2 de febrero del 2022]
[5] Sen, Amartya, La idea de la Justicia, trad. Hernando Valencia Villa, México, Taurus, 2010, p.386
