Tiempo de lectura aprox: 2 minutos, 56 segundos
* Más allá de las conocidas retóricas del pasado, la justicia y la equidad están plasmándose en los hechos, apuntaladas en el Programa las Rutas de la Transformación, donde se reflejan las 136 estrategias contempladas en el Plan Estatal de Desarrollo 2022-2024; nueva dinámica donde el quehacer político va de la mano de la opinión de la ciudadanía
Por Antonio Ortigoza Vázquez / @ortigoza2010
Especial de Expediente Ultra
En su Segundo Informe de Gobierno, Julio Menchaca Salazar, reafirmó los avances y efectividad que está teniendo en los hechos el nuevo arquetipo de una administración pública donde la población es la que determina el rumbo de las obras y proyectos sociales; en síntesis: el mandatario estatal junto con sus funcionarios, está demostrado que la transformación de Hidalgo es posible cuando la prioridad es ante todo la gente.
Más allá de las conocidas retóricas del pasado, la justicia y la equidad están plasmándose en los hechos, apuntaladas en el Programa las Rutas de la Transformación, donde se refleja la implementación de las 136 estrategias contempladas en el Plan Estatal de Desarrollo 2022-2024.
En esta nueva dinámica donde el quehacer político va de la mano de la opinión de la ciudadanía, hay un evidente y alentador marco de congruencia entre lo recabado en la campaña política del hoy gobernador y lo ahora aplicado en su gobierno.
¿Cuántas veces no observamos en el Estado que en las campañas donde los políticos pedían el voto a los habitantes de los 84 municipios, se ofrecían propuestas e infinidad de promesas que una vez en el poder se enviaban al archivo muerto?
En este mismo espacio, señalamos como buen presagio que el entonces candidato escuchara a la gente y en base a sus necesidades y planteamientos anunciara que de esas voces y el sentir popular se conformaría su programa de gobierno.
Ahora, en su Segundo Informe se palpa que esto es una realidad tangible porque como nunca se están canalizando recursos por 3 mil millones de pesos para programas sociales en materia de educación, salud, bienestar, economía, empleo y campo.
De igual forma y atendiendo las peticiones de la gente en las diversas regiones de la entidad, se han aplicado 9 mil 200 millones de pesos para obras a cargo de la Secretaría de Infraestructura Pública y Desarrollo Urbano Sostenible (SIPDUS).
El tema que llama la atención es que estas obras y programas ya no se ejecutan en base a programas diseñados desde los escritorios o pactados por intereses ajenos a las necesidades de la población, sino en atención a las peticiones de los ciudadanos, rompiendo el círculo vicioso de los contratos pactados en función de los intereses personales de los políticos en turno.
La llegada al poder de un gobierno sin nexos ni cordones umbilicales con el pasado, ha puesto en marcha una cruzada anticorrupción que lejos de las simulaciones de antaño, están sacando a la luz toda una serie de malversaciones de pasadas administraciones tanto del gobierno estatal como de los gobiernos municipales, con el llamado maxiproceso de la Estafa Siniestra.
Ahora, la obra pública está a la vista de todos y en un marco de transparencia que impide los cochupos, acuerdos bajo la mesa y triquiñuelas en lo oscurito mediante las cuales se desviaron cientos de millones de pesos, que configuran un fraude al erario estatal y, por ende, al dinero de los ciudadanos que pagan sus impuestos.
Esta batida contra la corrupción también se ha reflejado en una nueva ruta de las instituciones de justicia contra delitos como el narcomenudeo y el huachicol, delito éste último del que se han asegurado en los primeros dos años del gobierno de la transformación 3 millones 38 mil 647 litros de hidrocarburos, decomisándose 106 pipas, 563 vehículos y la cancelación de 77 tomas clandestinas. Resultados contundentes de esta batida con el crimen organizado que ubica a Hidalgo ahora en el quinto lugar de este delito cuando hace unos años ocupada el nada honroso primer lugar.
No puede pasarse por alto que uno de los rubros donde mayor énfasis ha puesto en gobernador Menchaca Salazar, es el de la educación al destinar el 43 por ciento del presupuesto a favor de la formación académica de miles de niños y jóvenes en el Estado.
Buena parte de esta inversión se ha destinado al equipamiento, becas e infraestructura educativa, como también a programas directos a favor de los estudiantes como la inversión de 400 millones de pesos para la entrega de útiles, uniformes y libros gratuitos a más de 600 mil estudiantes, en el ciclo 2024-2025.
Otro beneficio a resaltar es la entrega, por primera vez, de paquetes de calzado gratuito para 360 mil alumnos y alumnas de 4 mil escuelas públicas de los niveles preescolar y primaria de todos los municipios del Estado, con una inversión de 200 millones de pesos.
En síntesis, y tras echar un acucioso vistazo, al Segundo Informe de Gobierno, puede decirse que son hechos y no palabras, los que están hablando de un nuevo modelo de gobernar en pro de la gente. Los resultados saltan a la vista y no queda más que desear que estrategias exitosas como las Rutas de la Transformación sigan adelante y se fortalezcan como un vínculo entre los ciudadanos y el gobernador, Julio Menchaca Salazar, quien está escribiendo una nueva historia en Hidalgo.