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Por Saul Arellano / en Twitter: @saularellano
A través de esta nueva serie de artículos titulada “Lo que dice el Informe”, en México Social se documentará el conjunto de retrocesos que, a juicio de nuestro medio, constituyen los casos más graves y de mayor preocupación, tanto a nivel nacional como en las entidades de la República.
El propósito es, a partir de lo que efectivamente dice el informe de gobierno, convocar a la reflexión colectiva de las políticas, acciones y decisiones presupuestales que deberían implementarse, pues se trata de agendas relacionadas con el incumplimiento grave de los derechos humanos en nuestro país, considerando ante todo el mandato y estándares interpretativos establecidos en el texto Constitucional, particularmente en sus artículos 1º al 5º.
Los datos, debe ser subrayado de manera enfática, provienen todos del Anexo Estadístico del Tercer Informe de Gobierno, presentado por el Poder Ejecutivo de la Unión a la H. Cámara de Diputados, tal como lo establece la Carta Magna, en tanto un ejercicio obligado de rendición de cuentas respecto del estado que guarda la administración en el país, y, en evidencia, los resultados de la gestión que está en marcha.
Empeoran los datos sobre el cáncer de cérvix
Los datos del Informe de Gobierno, relativos al número de defunciones y la tasa de mortalidad por cáncer de cérvix, muestra, por un lado, un estancamiento en la reducción del número absoluto de casos, y una muy lenta reducción en la tasa de mortalidad por esta causa.
Sin embargo, el propi informe documenta una drástica disminución en la detección oportuna y la realización de estudios de citologías cervicales, por lo que los indicadores tanto de morbilidad, como de mortalidad podrían incrementarse en los siguientes años, dada la disminución de mujeres a quienes se les diagnostica con oportunidad este tipo de cáncer.
Es importante decir respecto de lo anterior, que en el año 2007 se contabilizaron 4,018 defunciones por cáncer de cérvix. Desde esa fecha, y hasta la cifra estimada para el año 2021, el promedio anualizado es de 3,995 defunciones, lo que, en términos reales, representa que no hay un cambio estadísticamente significativo en las cifras; es decir, no hay una disminución en esta materia.
Por su parte, la disminución en la tasa de mortalidad por cáncer de cérvix, sí registra una ligera disminución, al haber pasado de 14.1 decesos por cada 100 mil mujeres de 40 a 69 años de edad, a una cifra estimada de 10.3 decesos por cada 100 mil estimados para el año 2021.
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Se desploma la detección temprana
Sin embargo, como se comentó, hay una drástica caída en el número de citologías cervicales realizadas por la Secretaría de Salud. En efecto, en el 2007 se realizaron 3.058 millones de este tipo de estudios. Para el periodo de 2008-2011 el promedio anual fue de 2.44 millones; del 2012 al 2018 la cifra promedio anual se redujo otra vez a 2.17 millones de estudios.
Frente a estos datos, en el año 2019 el número de citologías cervicales se redujo a 1.44 millones, es decir, 50.6% menos que el promedio anualizado registrado en la administración 2012-2018. En el 2020 la cifra se redujo aún más, llegando a sólo 742,343 estudios, es decir, 192.4% menos que el promedio de la administración previa; mientras que la proyección para este 2021 es de únicamente 436,333 citologías, es decir, 397% menos que el promedio anual del sexenio previo.
El otro indicador preocupante es la drástica caída en el porcentaje de cobertura de detección realizada por la Secretaría de Salud, en mujeres de 25 a 64 años de edad. En este caso, el indicador de 2007 fue de 64.6%; en el 2012 se llegó al máximo histórico con 85%; sin embargo, para el año 2018, el último del gobierno de Enrique Peña Nieto, ya se había desplomado a únicamente 46.7%
La caída se ha mantenido: 33.1% de detección oportuna en el 2019; 15.1% en el año 2020; y un indicador proyectado para el 2021 de únicamente 7.5%.
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Empeoran los indicadores sobre cáncer de mama
A diferencia del cáncer de cérvix, causa por la cual se ha logrado, hasta ahora una reducción en la tasa de mortalidad; aunque un número casi constante en el número absoluto de decesos anuales; en el caso del cáncer de mama México ha experimentado un muy importante incremento en el número absoluto de casos de defunción, pero también en la tasa anual.
En efecto, mientras que en el año 2007 el número de defunciones por cáncer de mama, acaecidos en el país, fue de 4,581; para el año 2012 se incrementó a 5,583; en el 2018 llegó a 7,177; mientras que el número proyectado para este 2021 es de 8,074.
Por su parte, la tasa de mortalidad ha crecido en 23.1% entre el año 2007 y 2021. En efecto, pasó de una tasa de 16 defunciones por cada 100 mil entre 25 y 64 años, a 17.3 en el 2012; a 19.5 en el 2018; y a una estimación de 20.8 en el año 2021.
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También se desploma la detección oportuna
Debe destacarse que el número de mastografías proyectadas para el año 2021, registra una caída a niveles peores que los registrados en 2007. En ese año, el número fue de 566,103; el indicador llegó a un máximo histórico de 2,436,517 en el año 2012; sin embargo, en 2019 el dato disminuyó a 1,602,464 detecciones; bajó otra vez en 2020 a 1,086,784; mientras que la cifra proyectada en el 2021 es de únicamente 366,077.
Por último, debe subrayarse que el porcentaje de cobertura en detección oportuna por mastografías ha sido siempre muy bajo en el país. Fue de solo 8.5% en 2007; de 8.2% en 2008 y 9.6% en 2009. Creció a 19.9% en el 2012; y llegó a un máximo histórico -claramente insuficiente- en el año 2015, con un 27.7%. Frente a ello, en el 2019 disminuyó a 21.2%; en el 2020 a 14.4% mientras que la proyección 2021 indica un 4%.
