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* Un memorándum revela que la dependencia ha solicitado información, con carácter de “Extra Urgente”, a sus delegados del país para que informen sobre cualquier pesquisa que haya en contra del ex mandatario; todo apunta que correrá la misma suerte que Padrés y Duarte
Por La Redacción
Especial de Expediente Ultra
En la “lista negra” del combate a la corrupción que ha iniciado el gobierno de Enrique Peña Nieto, otro de los nombres que aparecen con carácter de urgente en la agenda de la Procuraduría General de la República (PGR), es el del ex gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina.
Dos son los ex mandatarios estatales que están prófugos de la justicia y representan parte de la prioridad de la procuradora, Arely Gómez González; el de Sonora, Guillermo Padrés y el de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, personajes a los que sus propios partidos, el PAN y el PRI, respectivamente, han desconocido buscando deslindarse del lodo que escurren por doquier sus antes distinguidos militantes, acusados de desvíos multimillonarios.
Ahora, con carácter de “Extra Urgente”, la PGR ha girado un memorándum a todos sus delegados en el país para que a la brevedad aporten informes sobre si existe registro o antecedente en contra de Rodrigo Medina de la Cruz. ¿Será la captura de Medina una de las sorpresas por venir?
Jaime Rodríguez, El Bronco, su sucesor, prometió llevarlo ante la justicia pero hasta el momento todo ha quedado en parafernalia política, no así en lo que revela el memorándum interno de la PGR que pone al descubierto la intención del gobierno federal por fincarle responsabilidades, con lo que la promesa de hacer realidad el combate a la corrupción empezaría a ser una realidad.