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* El delegado en Cuauhtémoc llamó a su partido a reponer el proceso para elegir al Coordinador de Morena en la CDMX, refrendando su lealtad a Andrés Manuel López Obrador pero dejando la puerta entreabierta para sumarse a una eventual candidatura por otros partidos, en caso de que sus propuestas no se cumplan
Por La Redacción
Especial de Expediente Ultra
El mensaje del delegado en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal donde pidió a Morena reponer el procedimiento para seleccionar a quien coordinará la organización de Morena en la Ciudad de México, sirvió de marco para que en plena explanada delegacional, y de manera virtual, el político zacatecano colocara “el cascabel” al Peje.
Contra lo que se pensaba, el Jefe Delegacional no anunció su salida de Morena y hasta agradeció la invitación de cinco partidos para asumirse como su candidato al gobierno capitalino el año entrante, pero desechó en la plaza pública, ser el “caballo de Troya de la mafia del poder.
Cauto y mostrando el colmillo retorcido por los años del fragor político, dijo que el crecimiento exponencial de Morena que en sólo tres años lo ha llevado a sumar a su causa 16 millones de votos en el país, tiene dos fundamentos: la presencia de un líder natural y honesto a carta cabal como Andrés Manuel López Obrador y contar con un proyecto auténtico de nación, basado de manera horizontal en la alianza con la sociedad.

Rodeado de sus colaboradores como Alejandro Rojas, el diputado Néstor Núñez, su hermano, el senador David Monreal y del cuestionado Pedro Pablo de Antuñano, demandó el zacatecano que no sean las “nomenklaturas” las que decidan Morena porque como lo ha dicho Obrador, “el partido no tiene dueño”.
Razón por la que ante lo incierto de la encuesta que lo ubicó hasta el cuarto lugar de las preferencias, cuando 17 de 20 sondeos espejo lo colocaron como puntero, llamó a enmendar las cosas para que en su aún partido no se repliquen los vicios antidemocráticos de la partidocracia.
MONREAL Y SU PLIEGO PETITORIO
Estas son las condiciones fundamentales de Monreal para evitar que el “cascabel” colocado a AMLO, no suene antes del magno evento programado para el próximo domingo en el Monumento a la Revolución.
“Propongo, planteo y sugiero a la Comisión de Elecciones, una de las siguientes dos opciones:
Una, reponer el procedimiento para la selección de la Coordinadora o Coordinador de Organización de Morena en la Ciudad de México, con la siguiente modalidad: que se levante una encuesta base, acompañada de dos encuestas espejo. Quien resulte arriba en los tres estudios, así sea por décimas, tendría el reconocimiento pleno.
Otra, considerar la posibilidad de una consulta ciudadana a población abierta. Si bien los estatutos no contemplan elecciones primarias, tampoco las prohíben.
Esta consulta podría ser organizada, vigilada y validada por la autoridad electoral o por un consejo de organizaciones no gubernamentales, ciudadanas e independientes, con experiencia en la observación electoral.
Que quede claro. Reponer el procedimiento no significa que me den a mí la coordinación. Quienes así piensan, están viendo una flama, no el incendio.
Reponer el procedimiento es reponer y fortalecer la confianza de la ciudadanía en Morena. Es demostrar que no somos iguales que los demás, y que el cambio que queremos para México empieza por nosotros mismos”.
UNA MILITANTE DE SEIS AÑOS
En su mensaje de la explanada delegacional, Ricardo Monreal citó un pasaje con el que buscó ratificar su lealtad al líder de su partido. Relato:
“Hace unos días, un domingo, mientras caminaba por las calles de la colonia San Rafael, portando un chaleco de Morena, se me acercó una niña de seis años, y me preguntó:
—¿Oye, tú eres de Morena?
—Yo le dije: Sí.
—Y su respuesta fue: Yo también.
—¿Por qué te gusta Morena?, le pregunté.
—Y la niña de seis años, de nombre Mariana, me respondió: —Por Andrés Manuel, y porque es la esperanza de México.
En efecto, este ascenso de Morena se debe a dos factores por lo menos:
“A que tenemos un líder natural, como Andrés Manuel López Obrador, forjado en la lucha social; congruente y honesto a carta cabal, y a que tenemos un proyecto alternativo de nación, una propuesta viable para rescatar al país de la descomposición en la que se encuentra”.
Y pontificó: “No dejemos que las nomenklaturas, las intrigas palaciegas y el sectarismo se adueñen del movimiento. Estamos muy a tiempo de corregir y blindar a Morena de estos vicios y desviaciones”.
Dijo además: “Si buscamos la democracia plena para el país, debemos consolidar antes nuestra democracia interna, distanciándonos de los vicios de la partidocracia. No soy ingenuo. Soy un político serio, un político responsable. Por eso es que no me precipito en la toma de decisiones. Sé que de ello depende el futuro del país. Lo digo sin arrogancia y sin soberbia.
UN REBELDE CON CAUSA
Pero tampoco puedo guardar silencio por el atropello y las intrigas hacia un militante modesto, que ha entregado la mitad de su vida a la construcción de este proyecto.
Por fortuna, hay formas de corregir el camino y seguir luchando a favor de Morena y por el triunfo del proyecto de nación de Andrés Manuel López Obrador en el 2018”.

Y para leer entre líneas y comenzar a deshojar la margarita, expuso:”Quiero informarles también, con toda transparencia, que he recibido propuestas de cinco partidos políticos para participar con ellos. Las agradezco, pero estoy en Morena, y estoy luchando por que aquí nos quedemos. No sabemos tampoco qué nos depare el destino, o si las circunstancias nos conducirán hacia senderos distintos”.
Y como si echara atrás la película del tiempo cuando emigró del PRI al PRD porque se le negó la candidatura del tricolor a Zacatecas, desempolvó el viejo discurso y añadió: “Afirmo aquí: no hemos tomado aún una decisión, pero debo decir que hoy, como ayer, no es ninguna osadía ser un rebelde con causa. Que hoy, como ayer, tenemos que actuar con dignidad por la democracia”.
Y ya para concluir el amacilgo de lealtades y mensajes cifrados, el delegado en Cuauhtémoc, agregó: “Se trata de una cuestión de integridad, de dignidad y de lealtad a los principios democráticos, a los principios de Morena: ¡No robar, No mentir y No traicionar al pueblo!
Y lanzó las arengas cliché que terminaron de amarrar el “cascabel” al Peje:
¡Que viva Morena!
¡Que viva Andrés Manuel López Obrador!
¡Que viva México!