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Por Enrique Sevilla Castillo / @kikesevilla12
En la física hasta la explosión mas devastadora tiene una explicación, un proceso, incluso es sencillo de predecir cualquier condición que derive hasta en el más mínimo cambio, en la política desafortunadamente no se puede ser tan exacto, pero para calcular consecuencias de distintas acciones se puede dar una lectura basado en el conocimiento empírico del hecho.
Pongamos como ejemplo una explosión atómica, la coalición Va Por México tomaría el papel central del núcleo, un núcleo que se mantuvo estable desde 2020, con altibajos, pero manteniendo la forma y medianamente el rumbo.
Hace 6 meses aproximadamente entraron a esta ecuación neutrones, que en este caso serian todas las presiones externas por parte del Gobierno de Campeche, del Gobierno Federal, el juicio de desafuero contra Alejandro Moreno, toda esta avalancha de información y calificación mediática estaba siendo colocada en el Núcleo.
Los presidentes del PAN Y PRD defendían a capa y espada a “Alito”, ciegamente refutaban todos y cada uno de los señalamientos en contra del Priista, más sin importar los logros electorales o legislativos, de la noche a la mañana el partido revolucionario institucional presenta una iniciativa de reforma constitucional, haciéndole el juego al presidente de la república.
La ecuación ya estaba hecha, y todo el conjunto de malas decisiones y soberbias llevo a la separación del núcleo de la coalición, lo que aparentemente no calculo Alejandro Moreno, es que no solo será Va Por México el gran damnificado, si no su partido.
La explosión fue tan fuerte que llego a todos los rincones Priistas, causando una fractura mas grande de la que ya existía, producto de imposiciones que se le atribuyen al mismo dirigente, ahora la brecha esta entre la propia bancada de senadores y comités estatales quienes urgen a una renovación de su Comité Ejecutivo Nacional.
Al final la soberbia termino consumiendo a Alejandro Moreno, como consumió a la coalición porque al final lo único que consiguió, es la extinción del PRI en las elecciones del 2024 ya que no tienen forma de competir en solitario.
